El terremoto de magnitud 7,5 registrado la mañana del viernes 2 de mayo de 2025, al sur de Puerto Williams, ha despertado el interés de la comunidad científica debido a su inusual ubicación y a la particular dinámica tectónica de la zona. A diferencia de los sismos más frecuentes en el centro y norte del país, este fenómeno se originó en una región de actividad sísmica poco común y con características distintas.
¿Por qué ocurrió el terremoto en Magallanes?
Según explicó Marco Cisternas, académico y director del Laboratorio de Geotsunami de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, el evento ocurrió en un área sismotectónica compleja y poco estudiada.
“El sismo de Magallanes ocurrió en un área sismotectónica compleja y poco entendida. Debido a su corta historia escrita, no se conoce cómo es la recurrencia de los terremotos a larga escala temporal”, sostuvo el especialista.
A diferencia de la mayor parte de los sismos en Chile, que son causados por la interacción entre la placa de Nazca y la placa Sudamericana, en este caso la actividad fue generada por la placa Antártica, la cual se desplaza más lentamente y es menos activa sísmicamente.
¿Qué es una “falla inversa” y cómo influyó en este sismo?
El especialista explicó que el terremoto fue provocado por una falla inversa, lo que implica que el fondo marino se eleva de forma vertical, empujando la columna de agua y generando condiciones para un posible tsunami.
“Este terremoto fue generado por una falla inversa, es decir, que el fondo del mar empuja verticalmente a la columna de agua. Esto es lo que genera tsunamis”, detalló Cisternas.
También agregó que el fenómeno tiene similitudes con los sismos de 2010 y 2015, aunque su energía liberada fue considerablemente menor.
¿Habrá réplicas tras el sismo?
Cisternas indicó que es esperable que se registren réplicas en los próximos días, algunas de ellas con magnitudes de hasta 6 grados. Aunque estos eventos son más pequeños, pueden seguir generando preocupación en una región que no está acostumbrada a este tipo de fenómenos.
¿Existe riesgo de tsunami en la región de Magallanes?
El académico fue claro en señalar que el evento podría generar un tsunami menor, dadas las condiciones geográficas y la magnitud del sismo. Aun así, descartó un riesgo significativo para zonas urbanas.
“Fue 30 veces más pequeño que el terremoto de Coquimbo de 2015. En principio, esto debería producir un tsunami menor, aunque si ocurren fenómenos asociados, como un derrumbe submarino, podría aumentar el riesgo”, explicó.
También hizo hincapié en que la geografía del extremo sur, con múltiples islas, canales y baja densidad poblacional, actúa como una barrera natural ante posibles tsunamis destructivos.
“Lo esperable son cambios en el nivel del mar de unos decímetros, no un tsunami de gran magnitud que impacte zonas densamente pobladas”, afirmó.
Llamado a la precaución científica
Aunque el riesgo de tsunami devastador es bajo, el experto recordó que todos los tsunamis, grandes o pequeños, deben ser tomados con seriedad desde el punto de vista técnico.
“Aunque sean pequeños o grandes, estos siempre son un tren de olas, no solo una. Para nosotros, los científicos, siguen siendo tsunamis instrumentales, aunque no sean destructivos”.