En una villa del sector poniente de Santiago, un fenómeno sorprendente está ocurriendo: vecinos reciben cuentas de luz en $0 pesos sin haber modificado sus hábitos de consumo. Este logro se debe a una ambiciosa iniciativa de energía solar comunitaria, que ya transforma la vida de cientos de familias chilenas.
Electricidad gratis: la experiencia de los vecinos de Talagante
Desde hace meses, la señora Jovita no paga un peso por electricidad. Sin desenchufar electrodomésticos ni reducir el consumo, su cuenta de luz llega en cero pesos, algo que describe como «maravilloso» y un alivio directo para su bolsillo. Como ella, numerosos vecinos de Villa Los Lagos en Talagante disfrutan de este beneficio gracias a la instalación de parques solares comunitarios.
Estas pequeñas plantas fotovoltaicas fueron construidas sobre terrenos sin uso de propiedad municipal, a solo cinco kilómetros de las viviendas beneficiadas. La energía generada se inyecta directamente a la red eléctrica, lo que crea una “bolsa de descuento” distribuida entre los participantes. Quienes postulan al programa y entregan la documentación requerida pueden ver reducciones inmediatas en sus cuentas.
Energía limpia y accesible para todo Chile
La comuna de Talagante fue la primera en implementar esta política, que ya se extiende a otras regiones del país. En un territorio largo y diverso como Chile, con recursos naturales excepcionales para generar energía solar, eólica e hidráulica, esta iniciativa refuerza su liderazgo global en energías limpias.
Aunque la masificación de energías renovables aún no ha tenido un efecto significativo en el precio nacional de la electricidad, la apuesta por democratizar el acceso a través de proyectos locales ya ofrece resultados palpables para familias de bajos ingresos. A pesar del contexto de tarifas en alza, con un aumento promedio del 60% entre marzo de 2024 y marzo de 2025, y una deuda histórica de 6.000 millones de dólares con generadoras, el Ministerio de Energía sigue avanzando con este modelo descentralizado.
Una política estatal que se expande
Antes de que finalice el mandato del presidente Gabriel Boric, se espera que 60 plantas solares comunitarias estén operativas en distintas zonas del país. Entre las últimas confirmadas destacan las ubicadas en la Región de Coquimbo, cuyos cielos despejados mejorarán aún más el rendimiento de estas instalaciones.
Más allá de la tecnología, este modelo busca garantizar un derecho básico: acceso justo a la energía. En palabras de los beneficiarios, se trata de un respaldo vital para familias que luchan diariamente por cubrir sus necesidades básicas, y una demostración de que las políticas públicas pueden traducirse en beneficios concretos para la ciudadanía.