El gobierno iraní ha elevado el tono frente a Washington tras confirmar que los recientes ataques estadounidenses causaron “daños considerables y graves” en sus instalaciones nucleares. Según declaraciones del ministro de Asuntos Exteriores, Abbas Araqchi, las condiciones actuales no permiten un retorno a las negociaciones previas, y Teherán ahora exigirá indemnizaciones por los perjuicios sufridos.
“La realidad ha cambiado”: Irán eleva el tono tras los bombardeos
Araqchi advirtió que las agresiones a las centrales de Isfahán, Natanz y Fordo han marcado un punto de quiebre en las relaciones con Estados Unidos. “Al dejar atrás una guerra, muchas realidades cambian, y las condiciones después de la guerra son fundamentalmente diferentes a las anteriores”, afirmó.
Tras 12 días de lo que calificó como “fuerte resistencia del pueblo iraní”, el ministro remarcó que “no es posible volver a las condiciones anteriores” y anunció que el país presenta “nuevas reivindicaciones”, con foco en reparaciones por los ataques sufridos.
Sin avances en negociaciones: Teherán acusa a EE.UU. de agravar la situación
El ministro subrayó que no se ha alcanzado ningún acuerdo para reanudar las conversaciones nucleares, apuntando a Estados Unidos como responsable de “complicar aún más las cosas”. En palabras de Araqchi, “murieron personas, estalló la guerra y la tarea se ha vuelto más difícil”.
Los bombardeos del pasado fin de semana a zonas estratégicas como Fordo, una de las principales instalaciones nucleares del país, han agudizado las tensiones y dificultado cualquier avance diplomático, afirmó el canciller.
Críticas al OIEA: Irán suspende cooperación y acusa falta de imparcialidad
Araqchi también confirmó la decisión de suspender la cooperación con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), lanzando duras críticas a su director general, Rafael Grossi. Según el canciller, el organismo “no actuó con honestidad, ni justicia” y habría “allanado el camino” a los ataques de Israel y Estados Unidos.
“Es evidente que se trató de un acto político”, aseguró, cuestionando que Grossi no haya condenado abiertamente los bombardeos. Para Irán, atacar instalaciones nucleares representa una violación imperdonable del Derecho Internacional, al tratarse de “varias” infraestructuras nucleares bajo resguardo internacional.