Una reciente campaña publicitaria protagonizada por la actriz Sydney Sweeney ha desatado una intensa polémica en Estados Unidos, alcanzando incluso a la Casa Blanca. El spot, creado para la marca de ropa American Eagle, ha sido calificado por diversos grupos como “racista” y acusado de fomentar el supremacismo blanco, lo que ha generado un amplio debate en redes sociales y medios de comunicación.
Reacción del gobierno

Steven Cheung, director de comunicaciones del gobierno estadounidense, se refirió a la controversia con duras palabras. En su declaración, apuntó: “La cultura de la cancelación se ha descontrolado. Este pensamiento liberal retorcido, imbécil y denso es una de las principales razones por las que los estadounidenses votaron como lo hicieron en 2024. Están hartos de estas tonterías”.
La respuesta oficial refleja el impacto que ha tenido la campaña publicitaria, que no solo ha captado la atención del público general, sino también la de figuras del ámbito político.
Contenido del anuncio
La actriz de “Euphoria” aparece como protagonista en el spot de American Eagle, donde el mensaje publicitario juega con el doble sentido entre las palabras “jeans” (pantalones) y “genes” (genes), ambas con pronunciación idéntica en inglés. Durante el anuncio, Sweeney afirma: “Los genes son traspasados por padres a sus descendientes, determinando factores como el color de pelo, personalidad e incluso el color de ojos. Mis jeans (genes) son azules”.
Este guion ha sido interpretado por algunos como una alusión controversial al concepto de herencia genética, lo que motivó acusaciones de racismo por parte de sectores críticos.
Más reacciones y elementos visuales
El hijo del expresidente Donald Trump, Donald Trump Jr., también se sumó a la discusión mediante una publicación en sus redes sociales. Compartió una imagen generada por inteligencia artificial en la que el expresidente aparece imitando la pose de Sweeney en la campaña, acompañada del mensaje: “Este ‘hanse’… Donald es tan sexy ahora!”
Además del video, otro elemento publicitario que encendió la controversia fue un mural que muestra la frase “Sydney Sweeney tiene hermosos genes”, en el que la palabra “genes” fue tachada y reemplazada con “jeans”. Esta acción fue vista por algunos como una forma de reforzar el juego de palabras, mientras que otros lo consideraron un intento fallido de aclarar el mensaje.
