El miércoles 18 de diciembre, un accidente químico en la faena minera La Fe, ubicada en los cerros de Ocoa, región de Valparaíso, dejó como saldo dos mineros fallecidos y tres afectados por intoxicación, presuntamente con monóxido de carbono. La tragedia ha puesto en el centro del debate las operaciones irregulares en la minería chilena.
Detalles del accidente
El incidente ocurrió alrededor de las 14:20 horas. Dos camionetas trasladaron a los mineros afectados al Cesfam de Ocoa, pero el personal sanitario, alertado por el SAMU sobre el riesgo de contaminación, rechazó recibirlos. Posteriormente, los cuerpos fueron llevados a la Clínica Los Leones en La Calera, donde se constató el fallecimiento de Alejandro López Farías (50) y Genaro Araya Bórquez (57).
Según las primeras indagaciones, la mina no contaba con los permisos correspondientes, lo que fue confirmado en el lugar por el seremi de Minería de Valparaíso, Jaime Rojas:
«Se trataría de una mina irregular.»
Denuncias previas a la tragedia
Se reveló que las operaciones en el yacimiento fueron denunciadas un mes antes del accidente. En un correo enviado el 7 de noviembre a Conaf, el vecino Iván Carvajal alertó sobre los trabajos en el sector, advirtiendo sobre el impacto ambiental en la Reserva de la Biósfera de Ocoa. Según su denuncia:
«La explotación minera en esta área protegida puede tener consecuencias devastadoras.»
El 13 de noviembre, Conaf realizó una inspección predial y detectó que la empresa involucrada no tenía registros mineros en la región de Valparaíso, calificando la actividad como una infracción a la normativa forestal. Sin embargo, Sernageomin contradijo la versión de Conaf, afirmando que el oficio respecto a los permisos se envió un día después del accidente.
Investigaciones en curso
El fiscal jefe de La Calera, Juan Sebastián de la Fuente, lidera la causa bajo la figura de cuasidelito de homicidio. Las pesquisas buscan determinar los vínculos entre los mineros fallecidos y la empresa responsable.
«Hay que establecer el vínculo con quienes los habrían contratado,» enfatizó.
Por su parte, Sernageomin analiza sanciones que podrían alcanzar hasta 50 UTM. Además, se investigan posibles infracciones ambientales y laborales cometidas por la empresa, que también opera yacimientos en Rancagua y Machalí.
Impacto en la seguridad minera
Con este accidente, la cifra de fallecidos en faenas mineras en Chile durante 2025 asciende a 11 personas. Aunque los números han decrecido en los últimos años, el caso evidencia la necesidad de mayor fiscalización y regulación en las operaciones mineras, especialmente en zonas de alto valor ecológico.
