Las acreencias bancarias son montos de dinero que quedaron olvidados en los bancos y están esperando para ser cobrados por sus respectivos destinatarios.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que si estos montos no son retirados después de tres años desde que se confecciona la lista por parte de las entidades financieras, el banco tiene la facultad de ingresar esos recursos a las arcas fiscales. O sea, serán entregados al Estado.
¿Cómo puedo revisar si tengo acreencias bancarias?
La Comisión para el Mercado Financiero (CMF) dispone de una plataforma (habilitada en esta página web (pincha aquí)) que permite consultar si se tienen montos pendientes de cobro, escribiendo únicamente el nombre.
Esto mismo también aplica para empresas, dado que hay millonarios pagos esperando ser cobrados por ciertas instituciones.
Tras ingresar el nombre —idealmente se debe insertar completo para evitar confusiones—, se hace clic en “buscar acreencias” y se desplegarán datos como el nombre, banco, monto, tipo de moneda y año en que se originó la acreencia.
¿Cómo se cobran las acreencias bancarias?
En el caso de que una persona logre confirmar que posee acreencias bancarias por cobrar, entonces debe dirigirse al banco respectivo y presentar su cédula de identidad vigente.
Además, es importante mencionar que si alguna persona poseía acreencias bancarias y perdió la vida, estas pueden ser cobradas por su cónyuge, quien deberá presentar en el banco el certificado de defunción correspondiente y el certificado de matrimonio, además de su cédula de identidad.
En la misma línea, esta también puede ser cobrada por su hijo o hija, presentando el certificado de defunción respectivo, certificado de nacimiento y cédula de identidad.
Por último, si la persona que posee acreencias bancarias se encontrara imposibilitada de efectuar el cobro de forma presencial por algún motivo, esta puede autorizar a un tercero para que lo haga, a través de un poder simple.