Chile, que en el pasado parecía tener una ruta más clara hacia el desarrollo, ahora enfrenta un panorama económico complejo que ha extendido el plazo para alcanzar estándares de países desarrollados a 50 años, según analistas.
Un país en pausa hacia el desarrollo
Hace una década, Chile tenía mejores perspectivas de desarrollo en comparación con otros países de la región, gracias a un manejo fiscal sólido y una economía en crecimiento. Sin embargo, problemas estructurales como baja productividad, excesiva burocracia y un sistema tributario complicado han ralentizado el progreso.
- Oportunidades laborales en medicina este abril 2025
- Bono Invierno 2025: Entérate si recibes el pago que supera los $80.000
- Trump evalúa destituir a Jerome Powell en medio de tensiones con la Reserva Federal
- ¿Cuándo pagan la devolución de impuestos 2025? Revisa las fechas clave del SII
- Nuevas oportunidades laborales en Calama: ¡Postula ahora!
Los expertos consultados coinciden en que el país perdió una «oportunidad de oro» para dar el salto hacia el desarrollo económico. Esto se traduce en que hoy, indicadores clave como el ingreso per cápita, ritmo de crecimiento y protección social están lejos de los niveles exigidos por la OCDE para ser considerado un país desarrollado.
Factores del estancamiento
Falta de productividad
Rodrigo Palma, economista de la Universidad de Barcelona y docente de la UTEM, señaló que uno de los principales problemas en Chile es la baja productividad, un aspecto que no se ha abordado con suficiente seriedad en las últimas décadas. Según Palma, diversificar y complejizar los sectores productivos habría sido crucial para fomentar un crecimiento sostenible.
Burocracia y permisología
El sistema burocrático chileno también representa una barrera significativa. Las trabas regulatorias y los tiempos de espera para obtener permisos afectan la inversión y el desarrollo empresarial, según Emilio Venegas, socio de Consultoría en BDO Chile.
Reformas tributarias fragmentadas
El sistema tributario, con la implementación de reformas como la de 2014, conocida como la “reforma de arena”, ha generado descontento entre sectores productivos y políticos. Alejandro Weber, decano de Economía de la Universidad San Sebastián, comentó que se necesita un cambio más profundo y coordinado en la política fiscal, para destrabar el crecimiento económico.
Desafíos políticos y económicos
Fragmentación política
La fragmentación del sistema político ha dificultado la implementación de medidas económicas coherentes y sostenibles. Esto se refleja en el pacto fiscal, una propuesta del Gobierno para mejorar la recaudación y el uso de los recursos públicos, que actualmente está dividida en varios proyectos en el Congreso y enfrenta resistencia política.
Consumo debilitado
El consumo interno, aunque mostró señales de mejora impulsadas por eventos como el Black Friday, sigue siendo un motor débil para el crecimiento económico. Según datos del Banco Central, los últimos trimestres han evidenciado un repunte tímido, pero insuficiente para revitalizar la economía.
El camino hacia el futuro
Chile enfrenta el reto de reestructurar su economía para recuperar el tiempo perdido y acercarse a los estándares de desarrollo. Esto implica mejorar la productividad, simplificar la burocracia, diversificar los sectores productivos y avanzar en reformas fiscales integrales. Sin estos cambios, el país seguirá enfrentando un horizonte lejano y cada vez más incierto para alcanzar el desarrollo.
Este análisis se basa en datos actuales y refleja las preocupaciones de economistas y especialistas en políticas públicas, subrayando la importancia de decisiones estratégicas en el presente para un futuro más prometedor.
