La guerra comercial entre China y Estados Unidos ha dado un nuevo giro este viernes tras el anuncio de Pekín sobre un aumento de aranceles al 125% para los productos de origen estadounidense. La medida intensifica aún más las tensiones entre ambas potencias, en un contexto marcado por respuestas cruzadas y creciente incertidumbre económica global.
China endurece su posición: “Ya no tienen cabida en nuestro mercado”
A través de un comunicado difundido por el Ministerio de Finanzas chino, la Comisión Arancelaria del Consejo de Estado explicó que la decisión se toma como reacción a los aranceles “anormalmente altos” impuestos por Washington, los que —según las autoridades chinas— infringen las normas internacionales de comercio y los principios fundamentales de la economía.
El nuevo gravamen comenzará a regir este sábado y apunta a desincentivar completamente la entrada de productos estadounidenses al mercado chino. “A este nivel de aranceles, los productos exportados desde Estados Unidos ya no tienen ninguna posibilidad de ser aceptados en el mercado chino”, advirtió el comunicado.
Impacto en los mercados y reacciones internacionales
La incertidumbre en torno a las políticas comerciales de Donald Trump provocó un nuevo retroceso del dólar, que este viernes alcanzó su valor más bajo frente al euro en más de tres años. A su vez, las bolsas europeas operaban sin una dirección clara tras la respuesta arancelaria de Pekín.
Mientras tanto, el presidente chino Xi Jinping hizo un llamado a la Unión Europea a resistir “juntas” el “hostigamiento” comercial, en una clara alusión al accionar del gobierno estadounidense.
Aranceles cruzados: China responde a la exclusión de la “pausa”
Cabe recordar que el pasado miércoles, Donald Trump anunció una pausa de 90 días en los aranceles que había establecido recientemente sobre las importaciones desde 60 socios comerciales. Sin embargo, China fue excluida de esta tregua.
En paralelo, Washington mantiene aranceles base del 10% y recargos del 25% sobre bienes estratégicos como acero, aluminio y automóviles. Sumado a los más recientes aumentos, el total de gravámenes aplicados a los productos chinos asciende ahora al 145%.