La mañana de este domingo se confirmó la detención de un hombre de 28 años que se entregó voluntariamente a Carabineros, tras reconocer su participación en el homicidio de Michael Peñaloza, ingeniero de 44 años que murió atropellado por su propio vehículo durante un asalto en Curacaví el pasado 19 de agosto.
Según informó Carabineros, el sospechoso se presentó en la 63ª Comisaría de Curacaví y fue derivado a la Policía de Investigaciones (PDI), institución que lleva adelante la investigación por instrucción del Ministerio Público.
Entrega voluntaria y coordinación municipal
El alcalde de Curacaví, Christian Hernández, explicó que la detención se concretó luego de que la madre del sospechoso contactara a la municipalidad para informar que su hijo le había confesado su participación en el crimen.
“Se comunica con mi jefe de gabinete para tomar contacto conmigo, con el fin de comunicarme que su hijo le había confesado su participación en el delito y que nos solicita ayuda para persuadirlo de que lo correcto era que se entregara”, señaló Hernández en entrevista con Meganoticias.
El jefe comunal relató que durante la madrugada acudió personalmente al domicilio junto al director de seguridad y al jefe de gabinete, resguardados por equipos municipales. Tras dialogar con la familia, lograron persuadir al hombre para que se entregara a Carabineros.
Actitud del detenido y rol de la familia
El alcalde precisó que el hombre “se muestra muy acongojado. La actitud de la persona era de mucha congoja, de mucha pena, y de arrepentimiento, pero aun así, no estaba completamente decidido de enfrentar la justicia”.
Agregó que la madre del implicado fue clave en el proceso: “Ella es la más complicada, todo el tiempo le recomendaba a su hijo que lo correcto era enfrentar las consecuencias de sus actos. La mamá lo acompañó a la comisaría, ella estaba muy resignada a que su hijo debía enfrentar la responsabilidad que le caben en estos hechos”.
Respecto a la negativa inicial del detenido para entregarse, Hernández sostuvo que este “tenía miedo de las consecuencias de sus actos, y tenía mucho miedo respecto de cómo enfrentar la situación. Tengo la impresión de que no estamos hablando de un delincuente profesional”.