El Departamento de Justicia de Estados Unidos despidió este lunes a varios funcionarios que estuvieron involucrados en los procesos penales contra el expresidente Donald Trump. Aunque no se especificó el número exacto, medios estadounidenses aseguran que más de una decena de fiscales, algunos de carrera, habrían sido removidos de sus funciones.
¿Qué informó el Departamento de Justicia?
Un funcionario del Departamento de Justicia, que habló bajo condición de anonimato, explicó que el fiscal general interino, James McHenry, tomó la decisión de despedir a estos fiscales porque consideraba que «no se podía confiar en que implementaran fielmente la agenda del presidente» debido a su participación en los casos contra Trump.
Renuncia de Jack Smith, fiscal especial
Entre los casos más destacados, se encuentra la renuncia del fiscal especial Jack Smith, quien lideró dos investigaciones federales contra Trump. Estas acusaciones incluían:
- Conspiración para alterar los resultados de las elecciones de 2020.
- Manejo indebido de documentos clasificados tras su salida de la Casa Blanca.
Aunque ninguno de los casos llegó a juicio, ambos fueron desestimados siguiendo la política del Departamento de Justicia de no procesar a un presidente en funciones. Smith presentó su dimisión después de que Trump ganara las elecciones presidenciales de noviembre.
En su informe final, Smith señaló que, de no haberse retirado los casos, Trump habría enfrentado condenas por sus intentos de retener el poder tras las elecciones de 2020.
Declaraciones de Trump y su postura hacia el Departamento de Justicia
Durante su campaña, Trump prometió «despedir al fiscal Smith el primer día» y acusó al Departamento de Justicia, bajo la administración del presidente Joe Biden, de llevar a cabo una «cacería de brujas política» en su contra.
En su discurso de investidura, Trump aseguró que pondrá fin al uso «violento, injusto y cruel» del Departamento de Justicia y del gobierno como herramienta política.
La decisión de despedir a los fiscales marca un punto crítico en la relación entre el nuevo gobierno de Trump y el Departamento de Justicia, destacando el impacto político de las investigaciones previas.