Durante la mañana de este martes, se llevó a cabo un operativo de desalojo en una toma habitacional en San Bernardo, Región Metropolitana. La acción fue liderada por funcionarios municipales y Carabineros, quienes llegaron al lugar cerca de las 7:00 horas para intervenir en el asentamiento ubicado en un terreno de propiedad municipal, cercano a avenida Condell.
Familias pagaban por «arrendar» sitios en la toma
Según informó el alcalde de San Bernardo, Christopher White, aproximadamente 40 personas vivían en el lugar, donde además se habían instalado negocios informales y una iglesia evangélica. El edil denunció que un pastor evangélico cobraba $100.000 a cada familia por el uso de espacios en el asentamiento, lo que motivó la presentación de una querella en su contra.
El terreno, de carácter municipal, habría sido ocupado de manera irregular durante varios años, y las autoridades apuntan a una organización informal que lucraba con la necesidad habitacional de las familias.
Procedimiento coordinado y sin mayores incidentes
El teniente coronel Alex Oporto, de Carabineros, explicó que se trató de un procedimiento planificado junto al municipio, considerando que los ocupantes estaban en situación de vulnerabilidad social. Según señaló:
«Todos los ocupantes fueron debidamente notificados y la mayoría ya se ha retirado del lugar. Solo permanecen algunas personas, quienes encendieron una barricada que fue controlada sin lesionados«.
Carabineros actuó con resguardo y conforme a derecho, disuadiendo a los últimos ocupantes para facilitar el ingreso del personal municipal, quienes comenzaron las labores de retiro de escombros e infraestructura improvisada.
Maquinaria y apoyo veterinario en el lugar
Durante el operativo, el municipio desplegó maquinaria pesada para remover estructuras y limpiar el área. Además, se incluyó una clínica veterinaria móvil, con el fin de rescatar y proteger a los animales presentes en el asentamiento.