Un descubrimiento que reescribe la comprensión del sistema solar
Científicos han detectado una composición única en un centauro, cuerpos celestes híbridos que combinan características de cometas y asteroides. Este hallazgo podría proporcionar nuevas pistas sobre los orígenes y la evolución temprana del sistema solar.
El estudio fue liderado por la astrofísica Noemí Pinilla-Alonso y el físico Charles Schambeau, de la Universidad de Florida Central (UCF), y publicado en la revista Astronomy & Astrophysics.
¿Qué es un centauro?
En términos astronómicos, los centauros son cuerpos menores que orbitan entre Júpiter y Neptuno. Su denominación proviene de la mitología griega, ya que, al igual que las criaturas mitad caballo y mitad humano, estos objetos son una mezcla entre cometas y asteroides, mostrando características de ambos.
Un centauro extraordinario: (2060) Quirón
El centauro en cuestión, llamado (2060) Quirón, fue observado por primera vez en 1977. Utilizando el telescopio espacial James Webb de la NASA, los investigadores identificaron una composición química sin precedentes:
- Hielos detectados en su superficie:
- Dióxido de carbono (CO₂).
- Monóxido de carbono (CO).
- Gases en su coma (la atmósfera difusa que rodea al núcleo de un cometa):
- Dióxido de carbono (CO₂).
- Metano (CH₄).
El físico Charles Schambeau destacó que “estos resultados no se parecen a nada que hayamos visto antes”. Además, añadió que esta composición química única podría ofrecer información valiosa sobre el sistema solar en sus etapas más tempranas.
El papel del telescopio James Webb
La detección de estas propiedades fue posible gracias a la tecnología avanzada del telescopio espacial James Webb, que permitió observar la coma gaseosa de Quirón a pesar de su lejanía del Sol.
Según Schambeau, “detectar comas gaseosas en objetos tan alejados del Sol como Quirón es todo un reto, pero el telescopio James Webb lo ha hecho posible”. Esto demuestra las capacidades del telescopio para revelar detalles nunca antes observados en el espacio profundo.
Implicaciones del descubrimiento
Este hallazgo abre nuevas preguntas y posibilidades sobre los centauros y su papel en la formación y evolución del sistema solar. La singular composición de Quirón sugiere que podría tener un origen o evolución diferente al de otros objetos similares, proporcionando una ventana hacia los procesos químicos y físicos primigenios.
La investigación continúa, con la esperanza de descubrir más detalles sobre la naturaleza y el impacto de estos cuerpos híbridos en nuestra comprensión del cosmos.