¿Qué beneficios trae el cambio de hora?
El cambio de hora trae consigo algunos beneficios, como el ahorro energético al aprovechar mejor la luz natural y reducir la demanda de iluminación artificial. Además, se busca mejorar la conciliación de la vida laboral y familiar, al tener más horas de luz durante la tarde. Sin embargo, también puede afectar el ritmo circadiano de las personas, generando trastornos del sueño y mayor cansancio durante los primeros días del cambio.
¿Por qué se produce el cambio de hora?
El cambio de hora se lleva a cabo con el objetivo de aprovechar al máximo la luz natural durante el periodo de mayor actividad de las personas. En el caso de Chile, el cambio de hora se realiza en el marco de la política energética nacional y responde a condiciones geográficas y climáticas propias del país. Además, esta medida se basa en estudios que demuestran los beneficios mencionados anteriormente.
Impacto en el atardecer
Como resultado del cambio de hora, el atardecer ocurre más tarde, lo que brinda más horas de luz durante la tarde. Esto puede ser beneficioso para realizar actividades al aire libre y disfrutar de actividades recreativas después de la jornada laboral. Sin embargo, también implica que los amaneceres serán más tardíos, especialmente en las primeras semanas del cambio, lo que puede afectar la adaptación de las personas a la nueva rutina.
Excepciones en Chile
Aunque la mayoría de las regiones en Chile cambian la hora, existen dos excepciones: Magallanes y la Antártica Chilena. Estas regiones mantienen la misma hora durante todo el año, siguiendo el horario UTC-3. Esta medida se adoptó en el año 2017 con el objetivo de mantener una hora estable en zonas tan alejadas y con condiciones extremas.
Consejos para adaptarse al cambio de hora
El cambio de hora puede generar ciertos trastornos en el ritmo circadiano de las personas, produciendo dificultades para conciliar el sueño y una sensación de cansancio durante los primeros días. Para adaptarse mejor al cambio, se recomienda mantener una rutina de sueño adecuada, evitar el consumo de cafeína y bebidas energéticas antes de dormir, y aprovechar la luz natural durante el día para regular el reloj interno del organismo. También se sugiere realizar actividades relajantes antes de dormir y evitar la exposición a pantallas luminosas antes de acostarse.
