El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este domingo que su gobierno impondrá un arancel del 25% a las importaciones de acero y aluminio a partir del lunes, en el marco de una nueva serie de medidas económicas que incluyen recortes en el gasto federal y aranceles recíprocos.
Nueva estrategia comercial
Desde el avión presidencial, Trump afirmó que “todo el acero que llegue a Estados Unidos tendrá el 25% de aranceles”, una medida que también aplicará para el aluminio. Además, adelantó que esta semana revelará nuevos aranceles recíprocos para igualar los impuestos que otros países aplican a los productos estadounidenses.
“Si nos gravan con el 130% y nosotros no, eso no seguirá así”, enfatizó el mandatario, agregando que esta medida no afectará a todos los países, sino solo a aquellos que, según su criterio, se benefician injustamente de Estados Unidos.
Impacto en el comercio internacional
Estados Unidos es el mayor importador de acero del mundo, con Canadá como su principal proveedor, seguido de Brasil, México y Corea del Sur. En tanto, China también será afectada por esta política, ya que desde el martes sus productos tendrán un arancel adicional del 10%, lo que generó una respuesta inmediata de Pekín con aranceles específicos sobre ciertos bienes estadounidenses.
Medida similar a su primer mandato
Durante su primera presidencia (2017-2021), Trump impuso aranceles del 25% al acero y del 10% al aluminio como parte de su estrategia de proteccionismo industrial, buscando fortalecer la producción nacional y reducir la dependencia de importaciones.
Ahora, en su segundo mandato, estas medidas vuelven a entrar en vigor en un contexto de tensiones comerciales renovadas y con el respaldo de figuras como Elon Musk, quien ha mostrado apoyo a la reindustrialización de Estados Unidos.
Las próximas reacciones de los mercados y de los socios comerciales de Estados Unidos serán claves para evaluar el impacto de esta política en la economía global.