El Índice de Precios al Consumidor (IPC) de marzo tuvo un incremento del 0,5%, situando la inflación anual en un 4,9%. Esta noticia genera preocupación debido a la superación de la barrera psicológica de los $1.000 por parte del tipo de cambio, lo que podría afectar los precios de los productos dolarizados. Por otro lado, se reportaron alzas significativas en productos como los tomates, la carne, el vino y la enseñanza universitaria.
Alzas de precio en alimentos y otros rubros
El informe del IPC de marzo destaca el aumento de precios en los alimentos y bebidas no alcohólicas (+1,2%) y en la educación (+4,9%), en parte debido al comportamiento estacional del mes. En alimentos, las mayores alzas se registraron en hortalizas, legumbres y tubérculos (+3,8%) y carnes (+1,1%). Específicamente, el precio del tomate se incrementó en un 22,7%. Por otro lado, los rubros de combustibles para vehículos personales (-1,8%) y transporte de pasajeros por carretera (-4,5%) presentaron disminuciones de precios.
Incidencia del tipo de cambio y proyecciones futuras
El aumento del tipo de cambio, que superó la marca de los $1.000, genera preocupación en relación a los productos indexados al dólar. Si esta tendencia se mantiene, es probable que los próximos indicadores incorporen incrementos en los precios de estos productos. Además, se espera que las próximas mediciones del IPC reflejen los efectos de las medidas arancelarias anunciadas por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Proyección de la Unidad de Fomento (UF)
Según el Banco Central, la UF se situará en $38.939,22 al 09 de abril y se prevé que aumente unos $194,69 en el próximo mes, alcanzando los $39.133,91 en total. Desde el comienzo del año, la UF ha experimentado un incremento de $520,05.