Dos inspectores municipales de la Municipalidad de Alto Hospicio fueron enviados a prisión preventiva tras ser formalizados por los delitos de porte de arma no autorizada y apremios ilegítimos, luego de una violenta detención ocurrida el pasado sábado 10 de mayo en esa comuna de la región de Tarapacá.
La medida fue adoptada tras una audiencia en la que se expusieron detalles de un grave ataque físico y psicológico cometido por los funcionarios en contra de un hombre que habría sido detenido irregularmente por un supuesto delito de daños.
Detalles del caso: agresión y uso de gas pimienta
Según informó la Fiscalía de Tarapacá, los hechos ocurrieron alrededor de las 01:45 horas del sábado, en un sitio eriazo cercano a Avenida Circunvalación con la Ruta A-16. Allí, los imputados detuvieron al denunciante sin justificación ni resistencia por parte del mismo.
De acuerdo con el relato del Ministerio Público, la víctima fue:
- Sujetada del cuello por los inspectores
- Arrojada al suelo y golpeada en distintas partes del cuerpo
- Insultada verbalmente durante la agresión
- Rociada con gas pimienta en los genitales y el rostro
Además, se reveló que los funcionarios no estaban autorizados para portar armas de disuasión química, como el gas lacrimógeno utilizado durante el ataque.
Fiscalía: No hubo justificación para la violencia
La fiscal Camila Albarracín calificó los hechos como gravísimos, señalando que no existía ningún fundamento legal que justificara el nivel de violencia ejercido ni la detención misma. Subrayó además que los imputados carecían de facultades legales para llevar a cabo un arresto de ese tipo.
Debido a la severidad de la agresión y al uso indebido de elementos disuasivos, el tribunal decretó la prisión preventiva de ambos inspectores municipales, quienes permanecerán detenidos mientras se desarrolla la investigación.
Investigación en curso
La causa quedó con un plazo de investigación de 90 días, tiempo durante el cual se indagarán los antecedentes de los funcionarios, las circunstancias del procedimiento y las lesiones sufridas por la víctima, que fueron calificadas como de carácter leve a moderado.
El caso ha generado preocupación en la comunidad local, reabriendo el debate sobre los límites de acción de los inspectores municipales y el uso de la fuerza en labores de patrullaje comunal.