Han pasado casi dos meses desde la desaparición de María Ercira Contreras, adulta mayor de 85 años cuyo rastro se perdió cuando celebraba el Día de la Madre en un restaurante de Limache, en la Región de Valparaíso. La mujer comía junto a su familia en el “Fundo Las Tórtolas” cuando de pronto se paró para ir al baño. Al demorarse en volver, miembros del círculo cercano fueron a buscarla y se percataron de que ya no estaba. Lo anterior activó las alarmas en el lugar, lo que derivó en una exhaustiva búsqueda que se ha desarrollado hasta hoy, sin obtener mayores antecedentes de su paradero. Si bien el caso se ha estado investigando como un accidente, los familiares de la adulta mayor han señalado que también pudo tratarse de un crimen, en específico, de un secuestro fallido.
«Hay que seguir descartando posibilidades»
«Natalia Hernández, nieta de María Ercira Contreras, habló en la mañana de este martes con el matinal “Mucho Gusto” y remarcó que “hay que seguir descartando posibilidades“. “Esto se ha investigado mucho como accidente, pero como accidente no hemos llegado a ningún resultado. Ya han pasado dos meses y pensamos que es necesario que se comience a investigar de lleno como un crimen“, señaló. En este sentido, expresó que “como un crimen, puede existir el ocultamiento del cuerpo, entonces, hemos recibido llamadas de limachinos y personas que viven por aquí en el sector, que han dado cuenta que aquí existen túneles subterráneos muy cerca al lugar donde desapareció mi abuela y podría ser que esté oculta en algunos de estos túneles”. Los túneles subterráneos mencionados por Natalia se encuentran en las cercanías del “Fundo Las Tórtolas” y por ahora se desconoce hasta dónde podrían llegar.
La teoría sobre supuesta participación del crimen organizado
Natalia continuó con su relato y abordó la tesis de que la desaparición de su abuela podría haber tenido que ver con el crimen organizado, una hipótesis que la familia no descarta. “Mi hermana ayer planteaba la posibilidad que si fue alguien del crimen organizado… quizás se pueden haber confundido de abuela y hayan tomado a nuestra abuela y se la hayan llevado. Si la secuestraron, con lo asustadiza que era mi abuela, le pudo haber dado un infarto y por eso ocultaron su cuerpo“, manifestó. De acuerdo a lo anterior, la nieta de la adulta mayor indicó que “pensamos que quizás se pudo haber tratado de un secuestro fallido“. “Yo pienso que ahora hay que cambiar la línea investigativa a una línea más criminal, porque a mí no me cabe duda que la PDI se ha movido en acción y en el momento con bomberos. Si bien no descarto lo del canal, pienso que hay que poner mayor énfasis a que quizás hay otra cosa detrás y que hay que investigar si se trata del ocultamiento del cuerpo”, agregó.