El 2022 fue un año excepcional para los bancos del país, al cerrar el ejercicio con ganancias por US$ 6.396 millones, lo que significó un incremento de 26,8% en doce meses, con un retorno sobre el patrimonio de dos dígitos. Tarea no fácil en un ambiente económico a la baja, un incremento de los niveles de impagos y con presiones globales, pero lo suficientemente atractivo como para incentivar el ingreso de nuevos actores.
Este jueves, Tanner comunicó que solicitará a la CMF una licencia bancaria, algo que explicaron, mediante un comunicado, como “el paso natural para continuar desarrollando y creciendo en el negocio de financiamiento a empresas y automotriz; obtener mayor y mejor acceso a financiamiento para entregar un servicio más integral y mejores condiciones a clientes corporativos y personas naturales; y, por último, lograr la sostenibilidad de nuestro negocio en el largo plazo”.
Actualmente existen 14 bancos en el país y 4 sucursales de entidades extranjeras. En total, suman activos por US$497.740 millones, pero entre Banco de Chile, Santander, BCI y BancoEstado, los más grandes de la industria, concentran el 65,21% del total de activos. Es un mercado más grande que hace 10 años, pero con menos actores, donde muchos bancos se fusionaron, otros se disolvieron, y sucursales se convirtieron en oficina de representación.
Según la cronología bancaria de la Comisión para el Mercado Financiero, en 2021 el Banco do Brasil canceló la autorización de su sucursales en el país, en 2019 siguió el mismo camino el japonés MUFG Bank, y en 2018 lo hizo el Banco de la Nación Argentina.
Respecto de los bancos, en 2018 se fusionaron Scotiabank y BBVA, en 2017 se autorizó la disolución anticipada de Banco Penta y Rabobank; en 2016 se fusionaron Itaú y Corpbanca, y se disolvió Deutsche Bank Chile y Banco París.
Por contraparte, las peticiones de licencias han sido menores. En marzo de 2018 se produjo la última autorización del regulador para el funcionamiento de un banco, aunque aquella vez fue sólo la aprobación para instalar una sucursal, la del Bank of China. Con anterioridad, las únicas licencias que fueron pedidas fue en 2015 por China Construction Bank que recibió la autorización de instalación, y en 2014 se aprobó la existencia de Banco BTG Pactual.
En 2015 el empresario Vicente Caruz, excontrolador de Banco de Desarrollo, inició los contactos con la entonces Superintendencia de Bancos (hoy CMF) para solicitar una licencia bancaria para la creación de un nuevo bancos, pero finalmente la idea no llegó a puerto.
Gonzalo Viveros, economista de Altafid, sostiene que “las dificultades de abrir un banco en Chile tienen que ver con la competencia, pero también con la regulación. En particular, hay estándares regulatorios vinculados con el nivel de capital y ratios financieros que hacen difícil la entrada”.
Respecto a las dificultades ligados con la competencia, agrega el economista, “lo más destacable son las economías de escala. Administrar poco capital es más costoso en términos marginales que mucho capital. Esto es una fuerza que tiende a la concentración. Un estudio del Banco Central muestra que en los 2000 la cantidad de instituciones bancarias cayó mucho y la industria se ha ido concentrando. Sin embargo, no es posible afirmar que eso ha sido perjudicial para la competencia. Aunque efectivamente las métricas típicas de competencia (relación márgenes sobre costo) han sido peores en período 2000-2020, esto se pudo haber debido a mejoras en productividad y las economías de escala”.
Así, el menor número no implican necesariamente un mayor retorno. Para marzo de este año, según datos de la CMF, la rentabilidad sobre patrimonio del sistema fue de 14,93%, por arriba del 12,95% que registraba para el mismo mes de 2013, pero cerca del ROE promedio de 14,03%. registrado en los últimos 10 años.
Por contrapartida, el ROE promedio de Tanner en 2022 fue de 8%, y de 10,9% en 2021.
Sin embargo, Felipe Herrera, portfolio manager de Renta Variable de Credicorp Capital Asset Management, señala que “hay una diferencia grande entre el ROE de los bancos grandes y los pequeños, incluso con los medianos. Santander y Banco de Chile tienen otra capacidad que BCI e Itaú incluso, hay un valor en la escala”.
De hecho, así lo entiende el mercado. Mientras Banco de Chile y Santander transa a 2,29 y 2,32 veces bolsa/libro, BCI lo hace a 0,9 veces e Itaú a 0,54 veces.