Con la finalidad de mejorar el panorama de la situación hídrica en la región de Coquimbo, está en proceso de gestión el proyecto «Estimulación de lluvias» de Startup Renaissance, que consiste en el bombardeo de nubes en zonas determinadas. Ya se están discutiendo aspectos técnicos, como las características del avión que realizará el bombardeo.
¿Cómo funciona el bombardeo de nubes?
En una entrevista con el diario El Día, el coordinador general del proyecto, Alejandro Trueba, explicó que el objetivo es estar en contacto con nubes promisorias que contengan humedad. Para ello, liberan un reactivo que siembra núcleos en las nubes, los cuales funcionan como base para la formación de gotitas de humedad que crecen y causan precipitación. El reactivo utilizado en las nubes es yoduro de plata, que tiene la misma forma y tamaño que un cristal de hielo, lo que permite que crezcan y eventualmente precipiten.
¿Cómo será el avión que «bombardeará nubes»?
El avión encargado del bombardeo de nubes es arrendado y cumple con los estándares de seguridad establecidos por los protocolos correspondientes. Además, se han preparado con reactivo suficiente para diez vuelos. Se estima que el avión contratado puede cubrir más de 1 millón de hectáreas, aunque la Junta de Vigilancia de Coquimbo está considerando un polígono de ese tamaño. A diferencia de otros países, en el caso de Coquimbo no se usan bengalas ni se sueltan humos, sino que se instalan tanques dentro del avión para dejar una huella de reactivo y estimular la formación de nubes dentro del área definida.