En un momento de máxima tensión en Oriente Medio, el presidente ruso Vladimir Putin alzó la voz desde Moscú para defender abiertamente a Irán, calificando los recientes ataques israelíes como una «agresión no provocada y sin justificación». Sus declaraciones, realizadas en una reunión con el canciller iraní Abás Araqchi, reflejan el respaldo político del Kremlin hacia su aliado en Teherán, en un contexto de creciente inestabilidad regional.
La reunión tuvo lugar tras una semana marcada por bombardeos cruzados entre Israel e Irán, y en un escenario donde Estados Unidos también intensificó su presión con ataques contra instalaciones iraníes. Moscú, al recibir a una figura clave de la diplomacia iraní, refuerza su posicionamiento estratégico en este nuevo capítulo de confrontación internacional.
Moscú fortalece su alianza con Teherán
Durante su intervención televisada desde el Kremlin, Putin reiteró su compromiso con el pueblo iraní, asegurando que Rusia «se esfuerza por brindar su ayuda» y expresó satisfacción por poder debatir directamente con el canciller iraní sobre las tensiones en curso. La presencia de Abás Araqchi en Moscú fue interpretada como una señal clara del eje político entre ambas naciones frente a lo que consideran una ofensiva injustificada por parte de Occidente e Israel.
Aunque no se mencionó explícitamente una posible asistencia militar rusa a Irán, el contexto bélico y la cooperación técnica existente entre ambos países han despertado la atención de los observadores internacionales.
El rol de Rusia como mediador, puesto en duda
El Kremlin ya había manifestado el 13 de junio su intención de actuar como mediador para contener una posible escalada, pero la Unión Europea rechazó de inmediato esta propuesta, alegando que Rusia no puede ser un actor neutral debido a su implicación directa en la guerra contra Ucrania desde 2022. Este posicionamiento europeo limita las posibilidades diplomáticas de Moscú, que busca afianzar su influencia en los conflictos de Medio Oriente al tiempo que se enfrenta al aislamiento occidental.
Irán, Israel y el eco de la guerra en Ucrania
La polémica se intensifica si se considera que, según denuncias de Kiev y sus aliados, Irán ha suministrado drones kamikaze a Rusia, los cuales han sido utilizados en ataques contra territorio ucraniano. Esta conexión militar agrega un nuevo matiz al conflicto entre Israel e Irán, involucrando de manera indirecta al Kremlin en una doble línea de confrontación: una en Ucrania y otra en Oriente Medio.