En nuestro país, es posible tener dos contratos de trabajo al mismo tiempo, según lo establece el Código del Trabajo. Sin embargo, existen algunas consideraciones y condiciones importantes que debes tener en cuenta al respecto:
Cláusulas de exclusividad:
Debes revisar tus contratos laborales para asegurarte de que no existan cláusulas de exclusividad que prohíban trabajar para otro empleador mientras estés bajo contrato con uno de ellos. Si existe una cláusula de este tipo, debes respetarla y cumplirla.
Jornada laboral:
Cada uno de tus contratos de trabajo debe cumplir con los límites de la jornada laboral establecidos por la ley chilena. La jornada máxima legal es de 45 horas semanales. Asegúrate de que ambos empleos se ajusten a esta normativa.
Notificación a los empleadores:
Es importante notificar a ambos empleadores sobre la existencia de los dos contratos de trabajo. Esto es fundamental para evitar problemas legales y para que los empleadores estén al tanto de tus compromisos laborales.
Conflictos de intereses:
Debes ser cuidadoso para evitar conflictos de intereses entre tus dos empleos. Si uno de tus trabajos afecta negativamente tu rendimiento en el otro o si existe competencia o incompatibilidad entre las actividades que realizas en ambos empleos, podrías enfrentar problemas con tus empleadores.
Impuestos y cotizaciones:
Ten en cuenta que los ingresos que obtengas de ambos trabajos pueden estar sujetos a impuestos y cotizaciones previsionales. Debes cumplir con tus obligaciones fiscales y de seguridad social correspondientes para evitar problemas con el Servicio de Impuestos Internos y las entidades previsionales.