En la jornada de este viernes se llevó a cabo la reformalización de los dos últimos detenidos por el robo a la empresa Brinks en Rancagua, región de O’Higgins, imputados por el delito de tenencia ilegal de armas, manteniéndose ambos en prisión preventiva.
¿Por qué fueron reformalizados?
De acuerdo con la información manejada por las autoridades policiales y el Ministerio Público, ambos habrían proporcionado apoyo logístico para que el resto de la banda ejecutara el millonario robo de $11.465.818.468, cifra confirmada por la empresa Brinks y presentada por la Fiscalía.
La reformalización tuvo lugar en el Juzgado de Garantía de Rancagua debido a que, durante la investigación, la Fiscalía de la Región de O’Higgins informó que se hallaron un arma de fuego y “miguelitos” enterrados en la vivienda de los acusados, situada en el sector San Ramón de Rancagua. Estos nuevos hallazgos se suman a los cargos previos de robo con intimidación y asociación ilícita, por los cuales ya estaban bajo prisión preventiva.
Otros seis imputados serán reformalizados por el asalto a Brinks
El fiscal Carlos Fuentes, jefe de Análisis Criminal de O’Higgins, detalló que “lo que hicieron fue tomar un arma, municiones, 158 ‘miguelitos’, hacer un hoyo en el patio de una casa y esconderlos”.
“El equipo policial no ha parado desde el día 16 de agosto, han hecho búsquedas en esa zona, han hecho los recorridos, han ido hacia el norte, hacia el sur, ha habido múltiples allanamientos que obviamente los hemos mantenido en reserva, precisamente buscando los elementos y también obviamente buscando el dinero”, explicó.
Mientras que el fiscal regional, Aquiles Cubillos, explicó durante la primera audiencia de formalización que los acusados se “concertaron para llevar a cabo un robo de más de 12 mil millones de pesos”. Al finalizar dicha audiencia, el tribunal estableció un plazo de ocho meses para la investigación.
Por su parte, el fiscal Carlos Fuentes anunció que solicitarán la reformalización de seis de los 20 imputados, tras el descubrimiento de cuatro teléfonos celulares, drogas y alrededor de un millón de pesos en efectivo, incautados mientras los acusados se encontraban bajo la medida cautelar de prisión preventiva.
Este artículo informa de un proceso judicial en curso, por lo que los involucrados no deben ser considerados culpables hasta que los organismos pertinentes lo determinen.
