La restricción vehicular es una medida que cada año busca reducir la contaminación atmosférica en la Región Metropolitana, como parte del Plan de Gestión de Episodios Críticos (GEC) impulsado por el Ministerio del Medio Ambiente. Su objetivo principal es limitar la circulación de ciertos vehículos durante los meses de mayor concentración de esmog, especialmente en invierno.
¿Cuándo comienza a regir la restricción vehicular 2025?
La restricción vehicular 2025 comenzará a aplicarse entre el 1 de mayo y el 31 de agosto de este año. Sin embargo, debido a que el 1 de mayo es feriado por la conmemoración del Día del Trabajador, la medida entrará en vigencia a partir del viernes 2 de mayo.
Esta medida será válida para toda la provincia de Santiago y también para las comunas de Puente Alto y San Bernardo.
Días y horarios en que se aplica la restricción vehicular
Según lo estipulado, la restricción vehicular funcionará de lunes a viernes, excluyendo los días festivos, en un horario que va desde las 7:30 de la mañana hasta las 21:00 horas.
¿Qué vehículos estarán sujetos a la restricción vehicular?
Si se mantienen los mismos criterios utilizados en 2024, los vehículos afectados por la medida serían los siguientes:
Vehículos a gasolina
- Autos catalíticos inscritos antes del 1 de septiembre de 2011.
Motocicletas
- Motos inscritas hasta el año 2010.
Estos vehículos tendrán prohibido circular los días que correspondan según el calendario rotativo de restricción, el cual será publicado por las autoridades en las semanas previas al inicio de la medida.
Fiscalización y multas por incumplimiento
La fiscalización de la restricción estará a cargo de:
- Carabineros de Chile.
- Inspectores municipales.
- Inspectores del Programa de Fiscalización del Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones.
En cuanto a las sanciones, quienes no respeten la medida se exponen a multas que van desde 1 a 1,5 UTM, lo que equivale aproximadamente a entre $68.000 y $102.000, tomando como referencia el valor de la UTM de marzo de 2025.
La implementación de esta restricción busca controlar los niveles de contaminación y mejorar la calidad del aire durante los meses de invierno, cuando las condiciones atmosféricas favorecen la acumulación de esmog.