El Seguro de Cesantía es una herramienta de protección financiera para los trabajadores afiliados a AFC Chile, que pueden utilizar en caso de desempleo. Este beneficio se financia a través de un 3% del sueldo imponible mensual, aportado por el empleador y, en algunos casos, también por el trabajador, dependiendo del tipo de contrato.
Cuando una persona queda sin empleo, puede acceder a giros mensuales con cargo a su Cuenta Individual de Cesantía (CIC), siempre que cumpla con las condiciones establecidas. En el primer mes se puede obtener hasta un 70% del saldo, en el segundo un 60%, y así sucesivamente con porcentajes decrecientes.
¿Qué pasa si renuncio a mi trabajo? ¿Puedo cobrar el seguro?
A pesar de que muchas personas asocian este beneficio únicamente al despido, también es posible acceder al Seguro de Cesantía si la desvinculación es voluntaria, es decir, por renuncia del trabajador. Sin embargo, deben cumplirse algunos requisitos claves:
- Acreditar la cesantía: Se debe presentar el comprobante de término de contrato, que en este caso puede ser la carta de renuncia.
- Contar con el mínimo de cotizaciones exigidas:
- Si el contrato era indefinido, se requieren al menos 10 cotizaciones mensuales.
- Si era a plazo fijo, el mínimo es de 5 cotizaciones mensuales.
Estas cotizaciones pueden ser continuas o discontinuas y pueden provenir de uno o más empleadores. Se contabilizan desde la fecha de afiliación o desde el último cobro del seguro, hasta el mes en que se terminó la relación laboral.
¿Cómo consultar el saldo de tu Cuenta Individual de Cesantía?
Si quieres saber cuánto dinero tienes acumulado en tu CIC para el eventual cobro del seguro, sigue estos pasos:
- Ingresa a la sucursal virtual de la AFC.
- Inicia sesión con tu RUT y ClaveÚnica o clave AFC.
- El sistema te mostrará el saldo total acumulado y te permitirá realizar una simulación de cobro o, si cumples los requisitos, iniciar la solicitud del beneficio.