“No se aplaudan porque las cagaron”, lanzó la influencer tras una actividad en la que pudieron comprar distintos objetos para la casa.
Este miércoles, los participantes de Gran Hermano realizaron una divertida actividad que dividió las opiniones de los jugadores.
Todo ocurrió gracias a una prueba de uno de los auspiciadores del reality, Mercado Pago, en la debían ponerse de acuerdo para comprar o descartar objetos para la casa.
En específico, los jugadores contaban con un monto inicial de $3 millones y tenían 30 segundos para llegar a un consenso sobre si adquirir o no los productos que iban apareciendo en la pantalla.
Fede Farrell fue el monitor de la actividad, proponiendo las distintas alternativas que consistían en juegos, alimentos, chocolates e incluso algunos objetos tecnológicos para los finalistas.
Sin embargo, los participantes solo lograron ponerse de acuerdo en cuatro de las propuestas y se quedaron con una mesa de ping pong, una cama elástica, un taka-taka y bebidas alcohólicas a elección.
Debido a la falta de acuerdos entre ellos, terminaron perdiendo al menos $2 millones del aguinaldo que recibieron.
EL ENOJO DE IGNACIA MICHELSON
Fue este detalle que desató el enojo de Ignacia Michelsoncontra sus compañeros. La influencer no se guardó nada y alzó la voz para retarlos a todos por haber pérdido parte del presupuesto.
“¡Son muy porfiados, wey! ¡Les dije! Nunca me hacen caso, siempre tengo razón”, lanzó la DJ.
Por otro lado, Pincoya aseguró que no importaba haberse quedado con parte del presupuesto y Hans comentó que de todos modos habían adquirido varios productos.
“¡Les dije! ¡Les dije! ¡Les dije!”, insistió Nacha. “Deberíamos haber comprado todo. Yo sabía que eso iba a pasar”, agregó.
Tras esto, el resto de los participantes comenzó a aplaudir al finalizar la actividad, pero Ignacia no se unió.
“¡Son todos unos cagados! No era ni su plata y querían gastarla, son unos cagados todos”, lanzó la influencer. “¡Cagados! Y no era su plata. Están como Resistiré (reality) a modo Fede, yo gastaba y gastaba, total, no mi plata. ¡Son todos unos cagados!”, insistió.
Jorge tomó la palabra y se mostró de acuerdo con el reclamo de Ignacia por no haber comprado más cosas durante la actividad. Ignacia insistía en que había que haber adquirido todo lo que pudieron.
“Era todo sí, no valía nada. Porque son unos cagados (…) ¡cagados! Culicagados, son todos unos culicagados aquí. No quisieron gastar una plata que no era ni ellos, ni siquiera es su plata. No se aplaudan, porque la cagaron”, sentenció Ignacia, molesta con el resto de sus compañeros.