Con la llegada del invierno, el gasto en combustibles como la bencina y la parafina se vuelve una preocupación constante para miles de chilenos. Cada tres semanas, la atención se centra en el Informe de Precios Estimados de ENAP, documento clave que entrega proyecciones actualizadas sobre las variaciones en el valor de estos productos. Este jueves 17 de julio se conocerá el nuevo ajuste, y los expertos ya han adelantado algunos escenarios posibles.
Caída en el precio de la bencina: ¿de cuánto será?

Según un análisis del Centro Latinoamericano de Políticas Económicas y Sociales (Clapes UC), si el Mecanismo de Estabilización de Precios de los Combustibles (Mepco) se comporta como se espera, se proyecta una baja del 2,3% en los precios de las gasolinas de 93 y 97 octanos, lo que representa una disminución cercana a $26,7 por litro.
Por su parte, el periodista económico Roberto Saa, de Meganoticias, estima un descenso más moderado, entre $21 y $23, atribuido al comportamiento del precio internacional del petróleo, que se mantiene bajo los 70 dólares por barril, y a un tipo de cambio que, aunque ha subido levemente, no sería suficiente para provocar un alza.
No obstante, Gonzalo Escobar, académico de la Universidad Andrés Bello, advierte que los precios podrían mantenerse sin variaciones, debido a que la leve baja en el precio del petróleo Brent podría verse contrarrestada por el comportamiento del dólar.
Diésel al alza por condiciones internacionales
En contraste con la bencina, el diésel mostraría un aumento del 2,4%, lo que implicaría un alza de aproximadamente $20,8 por litro, según Clapes UC.
Francisca Cuadros, investigadora del centro, explicó que este ajuste se debe a la combinación de varios factores: el incremento en el precio del diésel en la Costa del Golfo de EE.UU. —mercado de referencia para ENAP— producto de una reducción en los inventarios, y el comportamiento del tipo de cambio.
A esto se suma la diferencia en el funcionamiento del MEPCO, ya que, aunque los precios mayoristas se fijan cada tres semanas, el mecanismo actúa de forma semanal. Durante las últimas dos semanas, el componente variable del impuesto específico ha sido negativo para el diésel, lo que también influye en su proyección de aumento.
Parafina: leve estabilidad, pero con riesgo de alza
El comportamiento del precio de la parafina responde a otros factores, principalmente al Fondo de Estabilización de Precios de Combustibles (Fepcop), el cual solo se activa si el precio del kerosene supera los $1.100 promedio.
Roberto Saa aclaró que, aunque el precio de la parafina ha permanecido estable en los últimos días, no se descarta una subida moderada, que podría activar el Fepcop. Esta proyección se sustenta en estudios de empresas privadas especializadas en el seguimiento de estos valores.
En línea con esto, Gonzalo Escobar coincidió en que el valor del kerosene se mantendría estable esta semana, aunque advirtió que el alza del tipo de cambio podría anular cualquier efecto positivo derivado de la baja en el precio internacional del crudo.
Lo que se espera para agosto: precios al alza
Aunque las proyecciones para esta semana tienden a ser estables o con ligeras bajas en algunos combustibles, los pronósticos para agosto son menos alentadores. De acuerdo a Clapes UC, si se mantienen los niveles actuales del tipo de cambio y del crudo, se prevé un aumento en los precios mayoristas tanto de las gasolinas como del diésel en el próximo reajuste, programado para el jueves 7 de agosto.
Este escenario se vería impulsado principalmente por la subida del tipo de cambio, que ha ganado fuerza en los últimos días.
El mercado internacional, sin embargo, continúa moviéndose en terreno incierto. Factores como conflictos bélicos, guerras comerciales y nuevos aranceles, mantienen una alta volatilidad en las proyecciones de precios.
Gonzalo Muñoz, analista de XTB Latam, señaló que este panorama frágil podría derivar en nuevos ajustes según evolucionen las condiciones geopolíticas y económicas.
En tanto, Escobar advirtió que el posible arancel de EE.UU. a las importaciones de cobre podría aumentar la volatilidad del dólar, lo que impactaría de forma directa en el precio de los combustibles en Chile durante las próximas semanas.