Un alivio directo al bolsillo: el nuevo subsidio reduce la tasa del crédito hipotecario sin necesidad de postular.
El nuevo Subsidio al Dividendo ya está vigente en Chile y promete facilitar la compra de la vivienda propia mediante una rebaja automática en la tasa de interés del crédito hipotecario. Esta medida, impulsada por el gobierno a través de la Ley N° 21.748, busca dinamizar el mercado inmobiliario y beneficiar especialmente a quienes buscan su primera vivienda nueva.
Rebaja directa en la tasa y garantía estatal del 60%
El beneficio consiste en una disminución de hasta 0,6% en la tasa de interés hipotecaria, lo que se traduce en un ahorro mensual significativo en el dividendo. Este apoyo se complementa con una garantía estatal equivalente al 60% del valor de la vivienda, lo que facilita la aprobación del crédito por parte de las entidades financieras.
Este doble beneficio reduce el riesgo del banco y baja el costo final para el comprador, haciendo más accesible la casa propia.
¿Qué viviendas califican y cuáles son los requisitos?
Para acceder al subsidio, la vivienda debe cumplir con ciertas condiciones clave:
- Valor máximo de la vivienda: hasta 4.000 UF.
- Firma de promesa de compraventa: desde el 1 de enero de 2025.
- No aplica si la promesa fue firmada antes del 31 de diciembre de 2024.
- No está disponible para refinanciamientos hipotecarios.
Además, 6.000 de los 50.000 subsidios disponibles están reservados exclusivamente para beneficiarios del subsidio DS15, siempre que compren su primera vivienda y que esta no supere las 3.000 UF.
¿Quiénes lo reciben de forma automática?
Una de las grandes ventajas de este subsidio es que no requiere postulación. Las personas naturales que cumplan los requisitos lo recibirán de manera automática, al momento de contratar su crédito hipotecario.
Los primeros 50.000 créditos hipotecarios que califiquen, o todos los otorgados en un plazo de hasta dos años desde la entrada en vigencia de la ley (lo que ocurra primero), serán beneficiados.
La entidad financiera será la encargada de verificar los requisitos y aplicar el subsidio directamente en la tasa del crédito. El comprador tiene hasta 12 meses para concretar la compra y hacer uso del beneficio desde el momento en que es aprobado.