Los precios del petróleo y el oro se dispararon tras el ataque de Israel a Irán, mientras el cobre se desplomó. Un escenario que podría impactar directamente en la economía global y en el bolsillo de los chilenos.
El recrudecimiento del conflicto entre Israel e Irán provocó una inmediata reacción en los mercados internacionales. El petróleo se disparó, el oro alcanzó nuevos máximos y el cobre cayó con fuerza, generando incertidumbre en las bolsas y alimentando el temor a una crisis energética y económica global.
El petróleo se dispara por temor a un colapso en el suministro
La escalada bélica en Medio Oriente encendió las alarmas en los mercados petroleros. Irán, uno de los principales productores del mundo, podría reducir su suministro debido al conflicto. El precio del barril de West Texas Intermediate subió un 6,53%, alcanzando los US$ 72,48, mientras el Brent subió un 6,40%, situándose en US$ 73,80.
Pero el temor no solo se centra en Irán. El estrecho de Ormuz, por donde transita cerca del 20% del petróleo y una alta proporción del gas natural licuado (GNL) mundial, podría verse afectado si se intensifica el conflicto.
“No sólo preocupan las exportaciones iraníes, también el posible cierre del estrecho de Ormuz”, advirtió Derren Nathan, analista de Hargreaves Lansdown.
El oro, refugio ante la incertidumbre
Mientras los mercados de renta variable retroceden, el oro se fortalece como refugio seguro en medio de la incertidumbre. El precio del metal precioso subió 0,69%, alcanzando los US$ 3.409 por onza. Un comportamiento habitual en escenarios de alta tensión geopolítica y económica.
Las bolsas internacionales reaccionaron con caídas generalizadas. París, Fráncfort y Londres abrieron a la baja, al igual que los principales índices asiáticos como Hong Kong, Shanghái y Tokio, reflejando la aversión al riesgo de los inversionistas.
El cobre cae por el fortalecimiento del dólar
Chile, como principal exportador mundial de cobre, observa con atención la caída del metal rojo. Los futuros del cobre retrocedieron 2,10% en Nueva York, situándose en US$ 4,73 la libra, mientras que en Londres el precio de la tonelada cayó 1,3%.
La caída se explica principalmente por el fortalecimiento del dólar, moneda en la que se transa el cobre, lo que encarece su adquisición para los compradores internacionales.
Aunque el aluminio en China subió levemente, el descenso del cobre podría afectar los ingresos fiscales de Chile y generar presión sobre la moneda local, especialmente si la incertidumbre se mantiene.
Mercado en alerta: todo depende de la reacción de Irán
El foco de los mercados ahora está puesto en cómo responderá Irán. Una represalia directa podría escalar el conflicto a niveles regionales o globales.
“Una fuerte respuesta de Teherán contra Israel podría redefinir los escenarios macroeconómicos del año”, afirmó Stephen Innes, analista de SPI Asset Management.
Ante este escenario, muchos inversionistas optaron por reducir su exposición a activos de riesgo, anticipando un fin de semana volátil en lo geopolítico y lo financiero.