Más de una docena de naciones fueron vetadas o limitadas por seguridad nacional, según el expresidente estadounidense.
La Casa Blanca, bajo el liderazgo de Donald Trump, anunció este miércoles una nueva ola de restricciones migratorias que prohíben totalmente la entrada a ciudadanos de 12 países y limitan severamente a los de otros siete, entre ellos Cuba y Venezuela. Las medidas, que reviven la línea dura del expresidente en materia migratoria, entrarán en vigor el próximo lunes.
Estas son las 12 naciones totalmente vetadas
El veto absoluto alcanza a ciudadanos de Afganistán, Birmania, Chad, Congo, Guinea Ecuatorial, Eritrea, Haití, Irán, Libia, Somalia, Sudán y Yemen. Según Trump, estas naciones no cumplen con estándares mínimos de verificación de identidad o colaboran escasamente con Estados Unidos en materia de seguridad.
La medida implica el cierre total para residentes, turistas, estudiantes o personas con visas laborales.
Cuba y Venezuela, entre los parcialmente restringidos
Además de la prohibición absoluta, la orden ejecutiva restringe el ingreso a ciudadanos de Cuba, Venezuela, Burundi, Laos, Sierra Leona, Togo y Turkmenistán. En estos casos, se vetan visas para actividades comerciales, académicas o de turismo, aunque podrían existir excepciones puntuales bajo aprobación directa de la fiscal general Pam Bondi o del secretario de Estado Marco Rubio.
Esto significa que ni migrantes ni visitantes temporales de estos países podrán ingresar, salvo si prueban que su viaje beneficia directamente los intereses nacionales de EE.UU.
Las excepciones: atletas y eventos internacionales
En un gesto simbólico, Trump excluyó de la medida a los atletas que participarán en el Mundial de Fútbol 2026 y en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028, eventos en los que Estados Unidos será anfitrión. De este modo, los deportistas de los países vetados podrán competir siempre que viajen en calidad de representantes oficiales.
El origen de la medida: ataque en Colorado y retórica de seguridad
El exmandatario justificó las medidas haciendo alusión a un ataque ocurrido en Boulder, Colorado, donde un hombre presuntamente extranjero e indocumentado habría agredido a manifestantes proisraelíes. Aunque el sospechoso es de origen egipcio —país no incluido en el veto—, Trump usó el incidente para reavivar su discurso contra la migración sin control.
“El reciente ataque terrorista en Boulder ha subrayado los peligros extremos de permitir el ingreso de personas no verificadas. No los queremos aquí”, declaró Trump desde el Despacho Oval, en un video difundido en su cuenta de X.
Reacciones y comparaciones con su primer mandato
La decisión recuerda a la “Muslim Ban” de su primer período presidencial, que limitó la entrada de ciudadanos de países mayoritariamente musulmanes. Trump defendió esa acción como una política exitosa que, a su juicio, previno atentados terroristas como los ocurridos en Europa.
“No permitiremos que lo que pasó en Europa ocurra aquí”, sentenció, reiterando que la migración debe estar sujeta a estrictos controles de seguridad.