El jengibre (Zingiber officinale) ha sido utilizado durante siglos en la cocina y en la medicina tradicional. Hoy, distintos estudios científicos han confirmado varias de sus propiedades, que van desde aliviar síntomas digestivos hasta contribuir al cuidado del corazón.
A continuación, se presentan cinco beneficios del jengibre respaldados por investigaciones recientes.
1. Alivio de las náuseas
Diversos ensayos clínicos han demostrado que el jengibre ayuda a reducir las náuseas y los vómitos, con mayor eficacia que un placebo. El Servicio Nacional de Salud de Reino Unido (NHS) incluso lo recomienda en forma de alimentos o infusiones.
- Se considera especialmente útil durante el embarazo, en dosis bajas.
- Podría también ayudar en casos de náuseas por quimioterapia, aunque los resultados no siempre son consistentes.
- Sus efectos se atribuyen a la acción sobre los receptores de serotonina y al alivio de gases e hinchazón en el sistema digestivo.
2. Propiedades antiinflamatorias
El jengibre contiene gingerol y shogaol, compuestos con acción antioxidante y antiinflamatoria.
- Un estudio reciente mostró que el consumo diario de suplementos durante una semana redujo la formación de trampas extracelulares (NET) en neutrófilos, células que suelen agravar enfermedades autoinmunes como el lupus o la artritis reumatoide.
- También se reconocen sus propiedades antimicrobianas, lo que lo convierte en un recurso habitual para síntomas de resfriado y dolor de garganta.
3. Reducción del dolor
La evidencia señala que el jengibre puede atenuar distintas formas de dolor:
- En la osteoartritis de rodilla, algunos pacientes han reportado disminución de dolor y rigidez.
- En el dolor muscular postejercicio, un estudio indicó mejoras tras consumir dos gramos diarios durante 11 días.
- En el dolor menstrual, su eficacia se ha comparado con la de antiinflamatorios como el ibuprofeno.
El mecanismo se relaciona con la inhibición de prostaglandinas y leucotrienos, sustancias que intensifican la inflamación.
4. Salud cardiovascular y metabólica
El jengibre puede ayudar a controlar factores de riesgo cardiovascular como la hipertensión, el colesterol y la glucosa en sangre.
- Una revisión de 26 ensayos clínicos (2022) concluyó que el jengibre mejora los niveles de colesterol, reduciendo LDL y triglicéridos, mientras eleva el HDL.
- Otra revisión, centrada en personas con diabetes tipo 2, mostró que entre 1 y 3 gramos diarios contribuyen al control de glucemia y colesterol.
Además, investigaciones preliminares sugieren posibles efectos positivos en la salud sexual, aunque la evidencia en humanos aún es limitada.
5. Funciones cerebrales y cáncer
Estudios de laboratorio señalan que el jengibre puede tener efectos neuroprotectores, al proteger las células cerebrales del estrés oxidativo, un factor relacionado con enfermedades como el Alzheimer.
- Investigaciones in vitro muestran que ciertos compuestos pueden ralentizar el crecimiento de células cancerígenas.
- Sin embargo, estos resultados son iniciales y requieren más validación en estudios clínicos.
Consumo y precauciones
El jengibre es seguro en su uso alimentario o en infusión. Sin embargo, dosis superiores a 4 gramos diarios pueden causar malestares como acidez, diarrea o irritación bucal.
- Personas que usan anticoagulantes, fármacos para la diabetes o para la presión arterial deben consultar con un médico antes de consumirlo en exceso.
- Las mujeres embarazadas también deben evitar dosis elevadas sin supervisión profesional.
📌 Este artículo fue escrito originalmente por Dipa Kamdar, profesora titular de Práctica Farmacéutica en la Universidad de Kingston, y publicado en The Conversation.