Un estudio internacional reveló que Chile es uno de los países con mayor cantidad de llamadas spam a nivel global, lo que genera creciente molestia entre los usuarios.
Según el Global Call Threat Report 2024, el país se ubica en el segundo lugar mundial con un promedio de 23 llamadas spam al mes por usuario, solo superado por Brasil, donde se registran 26 llamadas mensuales.
¿Por qué llaman y cortan inmediatamente?
Las llamadas que se cortan apenas el usuario contesta están relacionadas con un sistema de los call centers llamado «marcador predictivo».
Este software realiza múltiples llamadas simultáneamente y, cuando un destinatario responde, lo transfiere a un operador humano. Sin embargo, si todos los operadores están ocupados, la llamada se corta automáticamente.
El profesor Miguel Sanhueza, de la Universidad Tecnológica Metropolitana, explicó a The Clinic que este sistema colapsa cuando marca más números de los que los operadores pueden atender.
«Los demás quedan bloqueados y quedan hablando ‘con la nada misma’. Aunque la empresa logró hacer la llamada telefónica, no logró entrar la publicidad o el operador», detalló el académico.
¿Qué pasa con las llamadas que cortan pero se repiten?
Aunque la publicidad no sea entregada, los call centers almacenan los números que han respondido, identificándolos como «líneas activas».
«Al responder, el número queda almacenado como celular activo. Por ende, estos robots ya saben cuáles son los celulares que pueden contactar posteriormente», explicó Sanhueza.
Esto significa que los usuarios que contestan este tipo de llamadas quedan registrados en bases de datos, lo que aumenta la probabilidad de recibir más intentos de contacto en el futuro.
Chile, líder en llamadas spam
Chile ha experimentado un aumento significativo en llamadas no deseadas en los últimos años:
- En 2021, el país era el séptimo en el mundo en llamadas spam, con 14 llamadas al mes por usuario (según Truecaller Insight).
- En 2024, subió al segundo lugar, con 23 llamadas mensuales.
Los call centers utilizan estas técnicas para campañas de compañías telefónicas, tiendas comerciales, candidatos políticos y otros servicios, además de ser un método utilizado por ciberdelincuentes para estafas telefónicas.
Este problema ha generado debate sobre la regulación del spam telefónico en Chile, aunque por ahora, los usuarios siguen enfrentando estas molestas interrupciones en su día a día.