El correcto orden y limpieza del refrigerador es fundamental para garantizar la seguridad alimentaria dentro del hogar. Uno de los riesgos más comunes al almacenar los alimentos de forma incorrecta es la contaminación cruzada, fenómeno que puede desencadenar enfermedades gastrointestinales severas, especialmente en niños, adultos mayores y embarazadas.
Esta situación ocurre cuando microorganismos o agentes tóxicos presentes en alimentos crudos, como las carnes, entran en contacto con productos listos para el consumo.
¿Cuáles son los riesgos de un refrigerador mal organizado?
Según explicó Betsabé Gajardo, académica de la Escuela de Nutrición y Dietética de la Universidad de Los Andes, el desorden dentro del refrigerador puede tener consecuencias directas en la inocuidad de los alimentos.
“Cuando los jugos de carnes crudas, por ejemplo, caen sobre alimentos o verduras listas para comer, se pueden producir enfermedades gastrointestinales severas”, advirtió la especialista.
Entre las bacterias más comunes que se transmiten por esta vía se encuentran:
- Salmonella
- Listeria monocytogenes
- Escherichia coli
- Campylobacter jejuni
Estas pueden generar desde malestares leves hasta cuadros clínicos más complejos.
¿Cómo organizar correctamente los alimentos en el refrigerador?
Para evitar la contaminación cruzada, la recomendación es organizar el refrigerador de arriba hacia abajo siguiendo esta distribución:
- Estantes superiores: almacenar alimentos listos para el consumo, como fiambres, lácteos, sobras cocidas y preparaciones ya elaboradas.
- Estantes intermedios: ubicar productos en proceso de preparación, como ensaladas y huevos.
- Estante inferior: destinado a carnes y aves crudas, idealmente selladas y en recipientes herméticos para evitar goteos.
- Cajones inferiores: guardar frutas y verduras frescas, que deben lavarse justo antes de su consumo.
- Puerta del refrigerador: utilizar para salsas, jugos, mantequilla y productos con conservantes, ya que es la zona menos fría.
Recomendaciones adicionales para el buen uso del refrigerador
- Mantener la temperatura entre 0 °C y 4 °C.
- Limpiar al menos una vez al mes con agua y detergente neutro.
- Evitar guardar alimentos calientes.
- No sobrecargar el refrigerador para asegurar una correcta circulación del aire frío.
Estas prácticas simples son claves para mantener una alimentación segura y proteger la salud de toda la familia.