La PDI incautó más de 7.000 kilos de cable de cobre robado desde distintas instalaciones eléctricas de CGE en la RM. El decomiso está avaluado en cerca de $70 millones. Francisco Jaramillo, director regional centro de CGE, señaló que este tipo de delito afecta la calidad del servicio para más de 550 mil clientes en la región Metropolitana. Asimismo, lamentó que el ilícito vaya en aumento. Ejemplo de ello son los hechos registrados recientemente. «En los últimos meses hemos tenido más de 30 incidentes de robos de conductor de cobre en El Bosque; a este caso se agregan situaciones anteriores en Calera de Tango, Buin, La Pintana, Puente Alto y San Bernardo, entre otras comunas», declaró. Desde CGE destacan que, además del monto incautado, se suma el costo de reposición del material, la mano de obra y el equipo necesario para restablecer el suministro eléctrico.
Decomiso de cable de cobre robado de instalaciones eléctricas de CGE en la RM
Francisco Jaramillo, director regional centro de CGE, reveló que se están coordinando con las policías y municipalidades para fortalecer el trabajo preventivo. Esto se traduce en presencia en los sectores donde el delito se ha reiterado, además de apoyar las investigaciones en curso. Lo anterior comprende el reemplazo de redes de distribución tradicionales, es decir, sustituir las redes con cable de cobre desnudo por redes de aluminio, entre otras tecnologías.
Medidas ante el aumento de robos de cobre en instalaciones eléctricas en la RM
El delegado presidencial de la RM, Gonzalo Durán, apuntó a la gravedad del delito identificado tras la incautación de más de siete toneladas de cobre. «Estamos trabajando con todas las empresas distribuidoras, con el propósito de minimizar la ocurrencia de este delito y su impacto en las comunidades. Hacemos un llamado a la población a que, cuando vea un eventual robo de cables, informe a las autoridades competentes», dijo Durán. El director regional centro de CGE afirmó que en la RM se ha multiplicado por diez el robo de cobre en sus instalaciones eléctricas respecto de 2024, equivalente a cerca de 20 kilómetros de cable sustraído.