El Departamento del Tesoro de EE.UU. sufrió un ciberataque atribuido a hackers presuntamente apoyados por el gobierno chino.
El ataque al sistema y sus implicaciones
El lunes, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos denunció un «gran incidente de ciberseguridad» ocurrido el 8 de diciembre, relacionado con una vulneración de seguridad en su sistema. Según una carta enviada al Congreso, el ataque fue atribuido a hackers vinculados al Gobierno de China. El incidente fue detectado a través de un proveedor de servicios de software externo, BeyondTrust, que alertó sobre el acceso no autorizado a estaciones de trabajo y algunos documentos no clasificados.
Respuesta del Departamento del Tesoro
El portavoz del Tesoro explicó que, tras el ataque, se contactó de inmediato a la Agencia de Seguridad de Infraestructura y Ciberseguridad para evaluar la situación. Se confirmó que el acceso a los sistemas fue desconectado, y no hay evidencia de que el atacante haya mantenido acceso al sistema. Además, se indicó que, basándose en los indicios, el ataque fue realizado por un actor de Amenaza Persistente Avanzada (APT), presuntamente patrocinado por el Estado chino.
Rechazo de China ante las acusaciones
El Ministerio de Exteriores de China negó las acusaciones, calificándolas de «infundadas y carentes de evidencia». La portavoz del ministerio, Mao Ning, reiteró la postura de Pekín en contra de actividades cibernéticas de este tipo, acusando a otros países de utilizar tales denuncias con fines políticos. Estas acusaciones y respuestas han sido recurrentes en las relaciones entre Estados Unidos y China en los últimos años.