El lunes 6 de febrero, la fabricante de computadoras Dell anunció unos 6.500 despidos, que equivalen al 5% de su plantilla total, siguiendo la ola de recortes de empleos en el sector tecnológico en Estados Unidos.
Medidas similares ya fueron tomadas por las gigantes Microsoft, Meta —el dueño de Facebook—, Alphabet —matriz de Google—, Amazon y la red social Twitter, mientras la industria se prepara para una posible recesión.
También preceden a la ola de contrataciones durante la pandemia de coronavirus, cuando las compañías buscaban satisfacer a quienes precisaban utilizar Internet para trabajar, estudiar o entretenerse.
El anuncio de Dell
Sin embargo, «las condiciones del mercado siguieron erosionándose con un incierto futuro», dijo el lunes el vicepresidente de Dell, Jeff Clarke.
«Los pasos dados para adelantarnos a los efectos de la desaceleración económica —que permitieron varios trimestres fuertes seguidos— ya no son suficientes», añadió.
Dell, con sede en Round Rock, Texas (sur), tenía 133.000 empleados a principios de 2022, casi un tercio de ellos en Estados Unidos.
La explicación de la mala situación financiera de Dell
Los ingresos de Dell cayeron 6% en el tercer trimestre de su ejercicio fiscal 2023, según los resultados publicados a finales de noviembre pasado. La venta de productos como computadoras, que es el grueso de su facturación, bajó 10%.
Los directivos del grupo atribuyeron esos resultados a la menor demanda en Estados Unidos y en el resto del mundo debido a la inflación y las altas tasas de interés.
El sitio especializado Layoffs.fyi estimó que, sin contar a Dell, en enero unos 88.000 empleados del sector tecnológico quedaron sin trabajo en todo el mundo.