Buenos Aires vuelve a posicionarse como la mejor ciudad para vivir en América Latina, según el ranking anual que elabora The Economist, y que califica las condiciones de vida en 173 ciudades del mundo en cinco categorías: estabilidad, atención sanitaria, educación, infraestructura, y cultura y medio ambiente. Santiago recuperó el segundo lugar y Montevideo (Uruguay) se ubicó este año en el tercer puesto.
En 2019 la capital de nuestro país había estado en el segundo puesto del ranking, pero desde 2020 Santiago estuvo en la tercera posición, tras la capital uruguaya y el año pasado sobrepasándola pero quedando detrás de San Juan en Puerto Rico.
De esta forma, este año recuperó su sitio previo al estallido social. En la vereda contraria, es decir, entre las peor catalogadas de la región están Caracas (Venezuela), Aguascalientes (México) y Guatemala.
A nivel global, Viena (Austria) vuelve a encabezar el ranking como la mejor ciudad para vivir. Ha estado en ese puesto en cuatro de los últimos cinco años. Copenhague (Dinamarca) está en el segundo lugar. Siguen en el listado Melbourne (Australia), Sídney (Australia) y Vancouver (Canadá).
Nueve de las diez primeras ciudades del ranking son pequeñas o medianas. Ciudades muy grandes y conocidas como Londres y Nueva York quedaron bien abajo en el ranking. De hecho, la capital de Inglaterra cayó 12 puestos con respecto al año pasado y quedó en el lugar 46, mientras que la ciudad estadounidense, bajó 10 puestos al lugar 69.
De las categorías que aborda The Economist para evaluar los países a nivel mundial, solo la estabilidad anotó un descenso promedio este 2023. Además, la inflación podría dañar la estabilidad en algunas zonas del planeta.
También aparecen en el ranking las peores ciudades para vivir en el mundo. Damasco (Siria), sigue siendo la peor evaluada hace una década, seguida por Trípoli (Libia). Este año también está Kiev (Ucrania) entre las menos habitables (noveno puesto), debido a la guerra con Rusia que se ha prolongado hace más de un año.