El Presidente Gabriel Boric ha sorprendido con su proactividad al ofrecer su testimonio ante la Fiscalía sobre el caso que involucra al exsubsecretario Manuel Monsalve, generando diversas reacciones entre los diputados oficialistas que ponderan las implicancias de este movimiento político.
Detalles de la Declaración de Boric
El pasado 29 de octubre, el Presidente Boric realizó una declaración voluntaria ante los fiscales Xavier Armendáriz y Francisco Jacir, enfatizando cómo y cuándo conoció la denuncia que afectaba al exsubsecretario Manuel Monsalve. Esta acción ha sido vista como una fuerte señal de colaboración del Ejecutivo, comprometiéndose a esclarecer el rumbo de la justicia en un caso de alta relevancia.
Reacciones de los Diputados Oficialistas
Las respuestas por parte de los parlamentarios oficialistas no se hicieron esperar. El diputado del Partido Socialista, Daniel Manouchehri, expresó que Boric ha actuado con gran transparencia, posicionándose como un aliado del sistema judicial. Sin embargo, recalca que la dimisión de Monsalve debería haberse concretado al conocer los hechos, subrayando la gravedad de las acusaciones.
Opiniones Variadas como Signo de Reflexión
Raúl Soto del PPD también valoró la decisión de Boric de testificar: «que este declare como testigo es una señal de colaboración y transparencia en relación al caso Monsalve». La senadora Camila Musante ha solicitado que todas las autoridades pertinentes testifiquen para esclarecer los hechos.
- Transparencia como pilar en la gestión política.
- Presión para llevar a cabo autocrítica interna en el oficialismo.
- Obligatoriedad de declarar para quienes puedan aportar en el caso.
Análisis Interno y Futuras Acciones
Desde el oficialismo surgen reflexiones, tal como lo señaló Daniella Cicardini. En el programa Estado Nacional, insistió que la alianza debe realizar una autocrítica sobre el manejo inicial del caso, sugiriendo que «las cosas se pudieron haber hecho mucho mejor». En paralelo, Gael Yeomans destacó que, si existen más involucrados, sería imperativo que abandonen sus cargos gubernamentales.