Este domingo se informó el fallecimiento de Manuel González, trabajador de la mina El Teniente, y quien fuera el primer brigadista que entró y el último que salió de la mina San José en el rescate de los 33 mineros que quedaron atrapados en el año 2010.
Fue en aquel año mencionado cuando la prensa nacional e internacional estaba al pendiente del descenso del brigadista en la cápsula Fénix, logrando realizar el rescate que hasta el día de hoy se recuerda. Además, González también fue jugador de O’Higgins entre 1982 y 1985, según dio a conocer Codelco.
Hijo de Manuel González confirmó su fallecimiento
A través de redes sociales, el hijo del brigadista, Cristian Alejandro González, confirmó el deceso de su padre y le dedicó emotivas palabras.
«Papito, te fuiste un 31 de mayo, justo en el día de la final de la Champions -que yo sé que te hubiera encantado ver-, y que, te cuento, finalizó 5 a 0 para los parisinos», parte el texto.
«Viejo, no sabes lo mucho que te voy a extrañar. Y es que no solo me diste la vida, sino que también -y a veces de forma criticada por muchos-, hiciste que fuera más fácil. Durante tus últimos días en la tierra, vinieron a mí un sinfín de recuerdos. Como cuando me llevabas a la feria y al cementerio, los cuales, en mi tierna niñez, representaban el mejor panorama posible. O como cuando te acompañé tantas veces a las diferentes canchas de fútbol que hay en nuestra región, espacio donde derrochabas talento y en el cual ganaste muchísimos títulos, además de, por supuesto, el cariño de la gente que te conocía», agregó.
Luego, mencionó que «sin duda, cometiste errores. Y claro, nuestra relación no era perfecta, discutíamos mucho. Pero al final día, ambos encontrábamos la forma de ‘ponernos en la buena’, porque el cariño era mayor. Papá, si escribiera acá cada uno de los momentos vividos junto a ti no terminaría nunca. Tu partida no solo significa un dolor tremendo, también deja un vacío enorme en mi corazón. Contigo, te llevaste una parte de mí».
«Desde hoy, y no sé hasta qué punto, he entrado en un modo piloto automático. Pero en esta, algo improvisada redacción, hay algo que me gustaría prometerte. Lo primero, es que intentaré ser feliz y vivir mi vida como yo quiera, algo que sé que te hubiera gustado. Y lo segundo, es que tal como me dijiste la última vez que estuvimos solos en nuestra casa, tu recuerdo jamás se irá de mi mente, porque, aunque ya no estés físicamente conmigo, siempre vivirás en mi corazón y en mis recuerdos y así, te mantendré vivo eternamente, ya que solo muere quien es olvidado y yo nunca te olvidaré», escribió el hijo de Manuel González.
Por último, señaló: «Descansa en paz, cabezón. Te amo. Y lo seguiré haciendo con la esperanza de que algún día, en algún lugar y en otro plano, nos volvamos a encontrar«.