La Corte Suprema confirmó la sentencia dictada por la Corte de Concepción y ratificó la cancelación de matrícula a una estudiante con TEA por poner en riesgo la convivencia escolar.
Los padres de la menor interpusieron un recurso de protección contra el Colegio Concepción Fraternidad, calificando la medida como arbitraría e ilegal. El colegio argumentó afectación a la convivencia escolar.
Argumentos del colegio para sustentar la sanción
La decisión se basó en la afectación a la convivencia escolar por agresiones físicas y verbales de la estudiante a compañeros y profesores, así como su resistencia a intervenciones educativas previas.
La Corporación Educacional argumentó el respeto al debido proceso y a las normativas, considerando el diagnóstico de TEA, TDA y funcionamiento intelectual limítrofe de la estudiante.
Agresiones a compañeros y docentes
Tras analizar los hechos, la Corte de Concepción desestimó el recurso de los padres. La cancelación de matrícula se ajustó a la normativa, considerando conductas graves que afectaban la convivencia escolar.
El colegio tomó medidas tanto académicas como socioemocionales, pero al persistir la conducta, se decidió por la cancelación de matrícula para preservar la integridad emocional de la comunidad educativa.