Jean-Marie Le Pen, figura emblemática y controvertida de la extrema derecha francesa, falleció este martes a los 96 años, rodeado de su familia en un centro de cuidados de Garches, al oeste de París. Su legado está marcado por su ascenso al balotaje presidencial en 2002 y sus declaraciones xenófobas y antisemitas.
Un líder controvertido
Le Pen fundó el Frente Nacional (FN) en 1972, un partido que se convirtió en la cara visible de la ultraderecha francesa. Reconocido por sus discursos xenófobos y negacionistas, fue condenado en varias ocasiones por negar crímenes contra la Humanidad.
El momento culminante de su carrera política fue en 2002, cuando sorprendió al acceder al balotaje de la elección presidencial, un hecho que provocó una movilización masiva en su contra y su derrota frente a Jacques Chirac.
Su influencia y el relevo en el Frente Nacional
En 2011, Jean-Marie Le Pen cedió la dirección del partido a su hija Marine Le Pen, quien renombró la formación como Agrupación Nacional (RN) en 2018 e intentó suavizar su imagen. Marine Le Pen consolidó la presencia de la extrema derecha en Francia, llegando al balotaje presidencial en 2017 y 2022, aunque sin lograr la victoria.
Un deterioro progresivo
Jean-Marie Le Pen nació el 20 de junio de 1928 en La Trinité sur Mer, en el oeste de Francia. Participó en las guerras coloniales de Argelia y Vietnam, lo que marcó su carácter combativo. En sus últimos años, su salud se deterioró considerablemente, lo que lo apartó de la vida pública.
En 2023 sufrió un problema cardíaco y en 2024 se constató un profundo deterioro físico y psíquico que le impidió asistir a un juicio en el que su partido estaba acusado de malversación de fondos públicos del Parlamento Europeo.
Reacciones en Francia
La muerte de Jean-Marie Le Pen marca el final de una era para la ultraderecha francesa, dejando tras de sí un legado de polarización, controversia y profundas divisiones en el panorama político francés.