Varios partidos políticos del oficialismo en Chile han anunciado su decisión de votar «En Contra» en el próximo Plebiscito del 17 de diciembre, que busca aprobar una nueva Constitución para el país. Esta sorprendente posición es respaldada por partidos como el PS, el PPD, el PC y los integrantes del Frente Amplio, incluyendo Comunes, Revolución Democrática y Convergencia Social.
Argumentos en contra de la nueva Constitución
Las razones detrás de esta inusual oposición varían. Algunos partidos han argumentado que la propuesta de nueva Constitución es «extrema», mientras que otros simplemente afirman que «la Constitución de Kast no sirve», haciendo referencia al hecho de que el texto fue elaborado únicamente por miembros del sector republicano.
La presidenta del Partido Socialista, Paulina Vodanovic, destacó que el proyecto aprobado por la mayoría de derecha en el Consejo Constitucional impone una visión económica ultraliberal, regresiva en derechos y conservadora. Advierte que amenaza los derechos de las mujeres, incluyendo las leyes de aborto en tres causales y la disponibilidad de la píldora del día después. También señala que se habilita la posibilidad de institucionalizar la discriminación hacia la diversidad sexual. En resumen, considera que no es una Constitución que una a Chile y que no satisface las necesidades del país.
El Comité Político del Partido por la Democracia (PPD) argumentó que la Constitución de Kast no es beneficiosa y divide a los chilenos. Sostienen que perpetúa una visión conservadora y un programa de gobierno afín al Partido Republicano de Estados Unidos. Advierten que cualquier proyecto de ley que no se ajuste a este modelo será controvertido e impugnado como inconstitucional.
El Frente Amplio, por su parte, califica el texto como «extremo» y expresa su decepción por el sectarismo de un sector político durante el proceso de redacción, ignorando las expectativas ciudadanas y profundizando las desigualdades e injusticias.
¿Habrá un tercer proceso constitucional?
A pesar de esta oposición, no parece haber planes para un tercer proceso constitucional durante el mandato del Presidente Gabriel Boric en caso de que la opción «En Contra» prevalezca en el Plebiscito. Se argumenta que las elecciones regionales y municipales en 2024 y las presidenciales en 2025 ocuparán la agenda política, lo que hace que un nuevo Plebiscito sea poco factible.
Sin embargo, se espera que el debate sobre el futuro de una nueva Constitución en Chile comience después del Plebiscito del 17 de diciembre.