En los últimos días, han surgido acusaciones contra el Ejército por presunta violación a los derechos humanos, específicamente relacionadas con la fatal marcha de instrucción militar en Putre, que terminó con la trágica muerte del joven conscripto Franco Vargas. Como resultado de estos hechos, siete uniformados han sido apartados de sus cargos y se han iniciado al menos 5 investigaciones para determinar cómo ocurrieron los hechos. La actividad también ha dejado en evidencia una serie de irregularidades en la Brigada Motorizada Huamachuco.
Exconscriptos narran la tragedia en programa de televisión
En el programa Podemos Hablar, emitido durante la noche del domingo, dos ex conscriptos del Ejército, Francisco y Cristofer, estuvieron presentes para exponer los detalles del caso de Franco Vargas. Ambos se habían unido voluntariamente al ejército y vivieron de cerca el momento de la marcha de instrucción donde falleció Vargas. Explicaron minuciosamente lo que vivieron y presenciaron en aquel complejo momento.
Desmentidos contra el Ejército
Los conscriptos desmintieron algunos elementos de la versión oficial entregada por el Ejército después del caso de Franco Vargas. Uno de los factores clave que desmintieron fue la afirmación de que los reclutas no estaban en condiciones de marchar con esas temperaturas y que no se les permitió abrigarse. Según ellos, no tenían la facultad de decidir qué hacer o qué no hacer, ya que eran el eslabón más bajo dentro del ejército. Aclararon que se les hizo sacar el chaquetón, a pesar del frío.
Conscripto enfermo
Además, los ex conscriptos revelaron que Franco Vargas estaba enfermo ese día, al igual que varios de los conscriptos, quienes aún no se habían recuperado de un resfrío que resultó ser influenza. Según ellos, no se le tomó la atención necesaria a Vargas y a los otros enfermos, y no se les permitió descansar adecuadamente antes de la marcha.
Revelaciones sobre los últimos minutos de Franco Vargas
Francisco y Cristofer acusaron cuestionables actitudes de sus superiores después de la muerte de Franco. Revelaron que, días después del incidente, un suboficial les dijo que «le tocó morirse, un pelado menos». Además, expresaron que siempre se les indicaba que tenían que decir que no sabían nada e seguir adelante, sin detenerse en los hechos ocurridos. Estas palabras fueron descritas como inhumanas y crueles por parte de los ex conscriptos.
«Se murió de una manera que no se la desearía ni a mi peor enemigo», concluyeron, y agregaron que fue inhumano que Franco Vargas muriera extrañando a su madre y sufriendo abusos por parte de sus compañeros sin que los responsables hicieran algo al respecto.