La muerte de seis trabajadores en El Teniente revive el historial de las mayores catástrofes en faenas mineras del país, con tragedias que superan el centenar de víctimas.
El accidente registrado el pasado jueves en la División El Teniente de Codelco dejó un saldo de seis mineros fallecidos tras un derrumbe provocado por un sismo. Las víctimas fueron Paulo Marín, Gonzalo Núñez, Alex Araya, Carlos Arancibia, Jean Miranda y Moisés Pavez.
Las autoridades informaron que la investigación está en curso para establecer responsabilidades. Desde el Gobierno señalaron que «no quedará impune».
Esta tragedia se suma a una serie de accidentes mortales ocurridos en la historia de la minería chilena, donde destacan eventos en la misma División El Teniente y en la comuna de Coronel, Región del Biobío.
«La Tragedia del Humo»: la peor catástrofe minera en Chile
El mayor desastre en faenas mineras ocurrió el 19 de junio de 1945, también en El Teniente, entonces operada por la Braden Cooper Company.
Un incendio en una bodega generó una densa nube de monóxido de carbono, la que se expandió por los túneles del yacimiento. La intoxicación causó la muerte de 355 trabajadores y dejó 747 heridos. Las labores de rescate se extendieron por tres días.
Este episodio es considerado una de las tragedias mineras más graves a nivel mundial.
Explosión por gas grisú en Coronel
Otro de los accidentes con mayor número de víctimas se registró el 30 de septiembre de 1994 en la mina Pique Arenas Blancas, en Coronel.
Ese día murieron 21 trabajadores tras una explosión de gas grisú a 990 metros bajo el nivel del mar.
El accidente derivó en el cierre definitivo del yacimiento, que en 2008 fue declarado Monumento Nacional de Chile.
Coronel ya había sido golpeado en 1968
En 1968, otra explosión de gas en la misma zona de Coronel provocó la muerte de 12 mineros. Existen pocos registros documentales de este hecho.
Más muertes en El Teniente: explosión en 1990
En marzo de 1990, nuevamente El Teniente fue escenario de un accidente fatal. Una explosión de roca, ocurrida durante la conexión de una red de cañerías de aire comprimido, dejó seis trabajadores muertos en el nivel 6.
El estallido generó un derrumbe que sepultó a ocho personas, de las cuales solo dos fueron rescatadas con vida.
El Teniente concentra dos de las peores tragedias mineras del país, mientras que Coronel ha sido escenario de múltiples muertes asociadas a explosiones de gas grisú.