El alcalde de Santiago, Mario Desbordes, ha anunciado un plazo definitivo para erradicar el comercio ilegal en el Barrio Meiggs. Esta medida surge en respuesta a los intentos previos que no lograron resolver la creciente problemática del comercio informal en el sector.
¿Qué está pasando en el Barrio Meiggs?
El comercio ilegal en el Barrio Meiggs se ha convertido en una de las principales preocupaciones en el centro de Santiago. Según Desbordes, la situación en este lugar ha llegado a niveles de anarquía, donde «no existe el Estado». Los conocidos «toldos azules», que han invadido las calles de la zona, son símbolos visibles de la informalidad que reina en el lugar.
Desbordes, al referirse a esta problemática, explicó que los intentos anteriores para poner fin a esta situación no tuvieron éxito, lo que lo llevó a definir una nueva estrategia y un plazo para abordar este desafío de manera definitiva.
El plazo establecido por Mario Desbordes
En su propuesta de campaña, Mario Desbordes había asegurado que eliminaría el comercio ilegal en las calles de Santiago en un 100%. Sin embargo, al asumir el cargo, reconoció que erradicar completamente este fenómeno en la vía pública es un desafío complejo. A pesar de ello, Desbordes ha reafirmado su compromiso de resolver esta situación en un plazo determinado.
El alcalde de Santiago señaló que, aunque el objetivo sigue siendo erradicar este comercio ilegal, el proceso será gradual y no se completará de inmediato. En sus declaraciones, Desbordes mencionó que espera tener el problema resuelto completamente para septiembre de 2027, un plazo de dos años y medio para lograr la eliminación del comercio ilegal en las calles de la capital.
Desbordes mantiene su compromiso
A pesar de los cuestionamientos y las expectativas de la ciudadanía, el alcalde ha insistido en que su compromiso sigue en pie. En sus palabras, «lo voy a erradicar, y eso lo mantengo», subrayando que el proceso tomará tiempo y que no será una tarea sencilla. De esta manera, el plazo fijado por Desbordes se presenta como un desafío ambicioso, pero con la intención de generar una solución definitiva al caos del comercio ilegal en el corazón de Santiago.