Un hombre deberá reembolsar 35 UF al Banco Santander después de haber sido indemnizado por un presunto robo desde su cuenta bancaria en 2021. La Corte de Apelaciones de Santiago determinó que las transacciones fraudulentas no se debieron a fallas del sistema del banco, sino a la irresponsabilidad del cliente al manejar sus datos personales.
Origen del caso: robo de más de $3 millones
El conflicto comenzó hace casi cuatro años, cuando el cliente descubrió que se habían realizado transferencias electrónicas desde su cuenta bancaria por un monto que superaba los $3 millones, transacciones que él aseguró no haber efectuado. Tras ello, presentó un reclamo por fraude al Banco Santander.
Sin embargo, la entidad sostuvo que las transacciones se realizaron utilizando las credenciales y claves del cliente, desde dispositivos y ubicaciones habituales, lo que apuntaba a una falta de cuidado en la protección de su información.
Sentencia inicial y apelación del banco
El caso fue llevado al Juzgado de Policía Local de Cerrillos, que inicialmente falló a favor del cliente, ordenando al banco a restituir el monto sustraído.
No obstante, Banco Santander apeló la decisión, argumentando que no hubo fallas en su sistema y que la responsabilidad recaía en el cliente.
Fallo final de la Corte de Santiago
Tras revisar las pruebas, la Corte de Apelaciones de Santiago revocó la sentencia inicial, concluyendo que las transacciones fueron posibles debido a la negligencia del cliente en el manejo de sus datos personales.
En consecuencia, el tribunal ordenó al hombre a devolver 35 UF (equivalentes a más de $1,300,000 según el valor actual), junto con los intereses correspondientes.